Recuerdo a una gran gesta de la historia del Cádiz
Han pasado 44 años del primer ascenso a Primera División, un hito en la historia de la entidad que este lunes ha sido recordado en el estadio Ramón de Carranza. La victoria 2-0 protagonizada ante el Tarrasa con el 5 de junio de 1977, vuelve a tener un recuerdo para la eternidad en las nuevas instalaciones.
El acto tuvo un grato momento para el recuerdo en la voz del periodista Willy Doña, que hizo un amplio recorrido de lo que fue esa temporada 1976-77 para el cadismo: “En la primera vuelta se estaba a cuatro puntos del ascenso. Una temporada en la que Carranza fue un templo inexpugnable, y donde se basó la consecución del objetivo. Ese día valía el empate, la gente estaba convencida del ascenso. Al final hubiera valido también la derrota, porque perdió el Oviedo”, recordaba
El teniente de alcalde del Ayuntamiento de Cádiz, Demetrio Quirós, quiso hacer un paralelismo con el momento actual, esperando que “nunca más haya que celebrar un ascenso a Primera, porque será señal de que el equipo permanece por siempre en la máxima categoría”.
Antes de la foto de familia final, el presidente Manuel Vizcaíno quiso recordar que en una de las placas “aparecen los dos mejores presidentes de la historia, Manuel de Diego y Manuel de Irigoyen”, por lo que considera que “este club seguirá rindiendo honores a su historia, y a todos aquellos que hicieron felices a los aficionados, como es nuestra labor ahora con el momento dulce que se vive en lo deportivo”.
Respetar la historia
Fue Manuel Vizcaíno, presidente de la entidad cadista, el que cerró el acto resaltando que “recordar y respetar nuestra historia es una de mis obsesiones desde que llegué aquí. El club, que tiene 110 años, tiene una historia potente”. En la misma línea recordó nombres de jugadores de aquella plantilla “que tienen su reconocimiento a la vez que la directiva encargada de aquel proyecto. Lo mejor está por llegar”, finalizó
Jugadores, técnicos y directivos de esta temporada 1976-77, junto con los representantes de los ya desaparecidos, se hicieron una foto de familia para despedir el acto.