La permanencia del Cádiz CF provoca un efecto inmediato en la plantilla. Algunas operaciones de continuidad estaban a expensas de la categoría en la que militara el equipo la próxima temporada y ya se puede asegurar, para empezar, que Sergio González seguirá una campaña más siendo el entrenador del conjunto amarillo.
Llegó en el mes de enero con una papeleta muy complicada y ha sido capaz de lograr una salvación que parecía muy lejana en aquel momento. Llegaba hasta el 30 de junio, con la posibilidad de continuar si lograba la permanencia. Muchos cadistas pedían que incluso acabando en LaLiga SmartBank se merecía continuar, pero finalmente manejará la nave amarilla en LaLiga Santander.
Y el técnico ya sabe que seguirá contando con varios efectivos que han sido clave en la permanencia. Por Rubén Alcaraz se pagará el millón de euros acordado con el Valladolid en el momento de su cesión. Era una cláusula obligatoria en caso de permanencia y el catalán seguirá dos años más de amarillo.
También va a seguir Lucas Pérez. Llegó con un segundo año garantizado, pero sólo en el caso de ser en la máxima categoría. Por eso ahora sí se puede decir que el gallego defenderá este escudo hasta el 30 de junio de 2023, algo que no habría pasado de haberse producido el descenso. Negredo, sin embargo, sí habría continuado en Segunda.
Por otro lado, Rubén Sobrino también seguirá en el club amarillo. El pasado verano firmó por tres temporadas, pero el delantero habría quedado libre si se hubiera producido el descenso. El autor del pase del gol a Lozano seguirá en el club cadista.
Después habrá que tomar muchas decisiones de altas y bajas. Como es sabido, Salvi no continuará y habrá que ver qué sucede con Álex Fernández. Los contactos para su renovación no terminaron de cristalizar y está todo en el aire. Está fichado Awer Mabil, que jugará cuatro años en el Cádiz.