Sergio González repasa la enfermería del Cádiz y pasa de superordenadores: "Más presión de la que tienen"

La lucha por la permanencia no da respiro para el Cádiz. El trabajado y sufrido empate en el RCDE Stadium sitúa a los amarillos con dos puntos de ventaja sobre el descenso. Una distancia que esperan ampliar en el Nuevo Mirandilla contra Osasuna.

A modo de previa del vibrante duelo que se vivirá en la Tacita el próximo martes, Sergio González ha comparecido en sala de prensa. El técnico ha repasado la situación de la enfermería cadista, con nombres propios como el de Fali o Gonzalo Escalante. Además, el entrenador amarillo valoró la ansiedad a la que están expuestos los equipos que tratan de eludir el descenso.

Análisis del partido ante el Espanyol. "Nos hace reforzar cuál es nuestro camino. Estamos muy pendientes de todos los partidos, pero el más importante es el que tú juegas. Nuestra primera parte fue buena, tuvimos situaciones importantes. En la segunda ellos dieron un plus más, pero el tramos final, ese ida y vuelta, les favoreció. Tuvimos situaciones buenas con malas tomas de decisión".

El rival. "Siempre preparamos el partido con la mejor versión del rival. Osasuna es un equipo muy fuerte con una línea continuista con Jagoba Arrasate. Son muy regulares en sus partidos. Han encontrado muchas fortalezas en su forma de jugar. Es un equipo muy equilibrado y nos va a exigir ese nivel de contundencia en los duelos".

La enfermería. "Tenemos lesiones: Meré, Fali, el tema del 'Choco' Lozano y Gonzalo Escalante. Desde el día del Madrid, Meré tiene una pequeña contractura en el muslo y no acaba de encontrarse bien. Fali, aductor. Estamos pendientes de las pruebas porque hay que esperar un poco. El 'Choco' tiene problemas que le impiden entrenar. Y Gonzalo ha hecho hoy ya media sesión y que esta semana vaya cogiendo carga para estar en lista ante el Valencia".

¿Rotaciones? "Vamos a hablar con todos, pero vamos a exprimir al máximo a todos los futbolistas. Nuestra idea es intentar poner el once que entendemos que nos va a dar esas prestaciones para ganar al rival. No tenemos esa capacidad de poder elegir partidos. Si son 45 o 70 minutos, a partir de ahí, iremos modificando, pero estamos para exprimirnos".

Ansiedad. "El mensaje que quiero enviar es que tenemos que ir de la mano con el equipo. Tengo la sensación de que en el mundo general todos queremos vernos salvados lo antes posible. No podemos trasladarle a los futbolistas más presión de la que ya tienen. Entiendo que cuando más normalicemos esos partidos, con más fuerzas saldremos a los partidos y propondremos un mejor juego. Propongo con eso meter en una burbuja al equipo y al futbolista. A que nos centremos en nosotros y veamos nuestro partido".

La inmediatez no ayuda. "El famoso ordenador que hace los tantos por ciento de descenso. En la primera no salíamos, pero estábamos cerquita de salir. Eso va cambiando. Hay equipos que ya han desaparecido. Eso es lo que creo que tenemos que dejar a un lado, por eso decía lo de la inmediatez".