Más pitos que aplausos al Pacha: indiferencia con Camello
-
Cuando el balón echó a rodar, el uruguayo fue pitado por buena parte de la grada
Un miércoles por la noche había más de 18.000 personas en el Nuevo Mirandilla. Hay muchas ganas de fútbol en Cádiz porque este equipo transmite buenas sensaciones. Da igual quién sea el rival, aunque en este caso era el regreso del Pacha Espino.
Se puede decir que hubo un poco de todo, pero más pitos que aplausos. En el calentamiento se llevó un cariñoso aplauso de un sector de la grada, pero cuando el balón echó a rodar había sonido de viento cada vez que lo tocaba.
Además, era un partido muy trabado, de muchos contactos y se vio envuelto en más de una jugada de fricción con Iván Alejo, que no tiene problemas para ir a la guerra cuantas veces sea necesario.
Mientras que a Camello se le obsequiaba con la indiferencia, había enfado con Espino cada vez que fingía una falta. Lo normal en el fútbol, pero ahora molesta más porque vestía la camiseta del equipo contrario.
Había más excadistas en el Rayo. Aridane se llevó el aplauso de la gente cuando el autobús de su equipo llegó al Mirandilla. A pesar de que han pasado ya unos años desde su marcha, el canario sigue cayendo bien. Con respecto a Álvaro García, ni fu ni fa. Ya ha pisado el estadio cadista en más de una ocasión con otra camiseta y pasa inadvertido.