Radoja salva la racha triunfal del Celta
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Así lo vivimos, Celta, Alavés: Radoja salva al Celta
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Las fotos de una victoria agónica
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Escucha el gol de Radoja
Victoria con mucho sufrimiento para el Celta, que a pesar de estar con uno más toda la segunda parte, no logró imponerse a un gran Alavés hasta el minuto 88. Radoja lograba un tanto balsámico para los de Berizzo, su primer gol con la celeste que permite seguir con la racha triunfal de 2017 de cuatro partidos con cuatro victorias que le colocan con 27 puntos cerca de los puestos nobles de la tabla.
La baja del 'Tucu Hernández obligaba a Berizzo a volver a apostar por un medio del campo formado por Radoja, el 'Chelo' y Wass dejando de nuevo a Aspas en la banda derecha con Guidetti en punta, Bongonda volvía a ocupar el carril izquierdo tras el gran partido de Sisto el pasado jueves en Copa. En la línea defensiva le tocó el turno de rotaciones a Jonny, mientras que Fontás volvía al once inicial tras descansar durante la semana. En el Alavés Pellegrino no sorprendía con su alineación y partió con su once de gala.
Y como notó el equipo la ausencia del chileno ante un Alavés que presionaba muy arriba y dificultaba y mucho el juego vigués. Hasta al minuto ocho los de Berizzo no se acercaron a la meta defendida por Pachecho gracias una buena acción de Aspas que pecó de generoso ante el meta alavesista al querer regalar el gol a Guidetti. Respondía el Alavés con un avance de un gran Camarasa al que tuvo que parar Cabral con una falta que le costaba la tarjeta amarilla.
Los vitorianos seguían incomodando y mucho el desarrollo del juego ante un Celta que no era capaz, salvo algún chispazo de calidad de crear peligro en la meta visitante. Ibai, Camarasa y Deyverson obligaban a la defensa olívica a estar atenta ante la movilidad de este tridente que sin generar ocasiones claras si deambulaba por la portería de Rubén. Mucho mediocampismo y pocas ocasiones en un choque intenso y con ritmo en el que Guidetti, cerca del minuto 30 volvió a rozar el gol. Prolongó Aspas de cabeza y el sueco llegó con la puntera a una pelota que se fue rozando el palo derecho de Pacheco.
Sin ser capaz de generar un buen caudal de juego Aspas volvió a fallar una gran ocasión a falta de siete minutos para el descanso, de nuevo el de Moaña, con todo para batir a Pacheco buscó a Guidetti, que esta vez, no llegó a la dejada del canterano. Siguió buscando el Celta mejorar sus prestaciones, pero Melero López, en el 45 señaló el camino de vestuarios
Roja a Feddal
Tras el descanso, la cara del partido cambió de forma radical con la segunda tarjeta amarilla a Feddal a los 24 segundos de la reanudación. El Alavés se quedaba con unos menos y Berizzo, consciente de la tarjeta de Cabral lo sustituía por Jonny. La primera realmente clara llegó en el 57, Guidetti se la daba un Roncaglia que rompía el balón directo a la cruceta vitoriana, pero el esférico se fue muy pegado a la madera. El Celta se había hecho con el control del juego y los de Pellegrino solo inquietaban a Rubén a través de jugadas a balón parado.
El Alavés se repusó del golpe y volvió a ser el equipo organizado de la primera mitad, el Celta tenía la pelota, pero le faltaba claridad en los últimos metros. Berizzo, ya cerca del 70 daba entrada a Rossi, autor de un gol ante el Valencia, por un agotado Guidetti. No encontraba huecos el conjunto de Berizzo que veía como pasaban los minutos y cada vez observaban más de lejos a Pacheco. Quedaban 15 minutos y Aspas tenía, en su cabeza, la tercer ocasión del encuentro, pero su remate se iba de nuevo por fuera.
La inoperancia local envalentonó a un Alavés que no sufría en Balaídos llegando a tener la mejor de oportunidad de la reanudación por medio del Theo Hernández que tuvo que sacar con una palomita Rubén. Contestó el Celta por medio de Wass y Marcelo Díaz, aunque los vigueses seguían sin hilvanar dos buenas jugadas y el tiempo se les estaba acabando, algo de lo que era consciente el cuadro victoriano que empezaba a arrancarle segundos al reloj.
A la desesperada Mallo lanzó un trallazo al palo con una parábola perfecta que Pacheco siguió con su mirada para acabar impactando, tras el rechace de la madera, con su cuerpo. Esta jugada era el aviso del tanto salvador de Radoja, su primer gol con la celeste, un chicharro fundamental para un equipo que no veía como meterle mano a un Alavés que mostró el porqué de su buena campaña ya que tuvo hasta el último minuto oportunidades de lograr el empate. Victoria que permite a los celestes sumar tres puntos y escalar posiciones en la Liga.
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