Gran partido de Jonny para ayudar a España a llegar a la final
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Jonny peleará con Gayá por un puesto en el once
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Sin presencia celeste en otro triunfo de la sub 21
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Rubén Blanco, reflejos de felino en los entrenos de la 'Rojita'
El Celta estuvo, para no variar, perfectamente representado en el Europeo sub 21 que se está celebrando en Polonia. Albert Celades, seleccionador de España, volvió a confiar en Jonny para disputar las semifinales del campeonato. El canterano celeste rindió a un gran nivel y ayudó a la selección a vencer a Italia (3-1 con goles de Saúl) y clasificarse para jugar la gran final del torneo contra Alemania.
En cambio, Rubén Blanco vivió otro encuentro más en el banquillo, desde donde observó como su compañero Kepa Arrizabalaga hizo paradas de mérito, sobre todo en la primera mitad, para ayudar a la 'Rojita' a asegurarse, como mínimo, la medalla de plata. La lucha por el título va a ser el próximo viernes a las 21.45 horas en el Krakow Stadium de Cracovia.
Al igual que colaboró a la perfección Jonny, que a los pocos minutos recibió una dura entrada de Calabria. Incombustible y participativo desde la zurda, entendiéndose a la perfección con todo el que pasaba con su banda y con el omnipresente Dani Ceballos. Además de sumarse al ataque, le tocó 'bailar' con Bernardeschi, uno de los jugadores más peligrosos de Italia y que le obligó a esforzarse al máximo.
De hecho, fue al autor del empate. El vigués lo persiguió estorbándole para que le costara trabajo tirar, pero ninguno de sus compañeros salió de frente para ayudar a frenarlo y, finalmente, tras una gran diagonal, chutó a puerta y el balón dio en la bota de Jesús Vallejo y se coló en la portería de Kepa.
Antes de esto, Saúl Ñíguez se encargó de abrir el marcador para 'La Rojita' al pase de Ceballos que cazó en la frontal del área y que terminó colando de un zurdazo en la meta de Donnarumma. A los pocos minutos, Italia se quedó con diez, tras la expulsión de Gagliardini al ver la segunda amarilla. Aunque la zaga no pudo detener al imparable Bernardeschi que puso el citado empate en el luminoso.
Pero duró poco la alegría en el banquillo italiano, porque apareció Saúl, el gran héroe del partido, para marcar dos nuevos goles. El primero de esta tanda gracias a su esplendorosa zurda y tras un potentísimo disparo desde fuera del área. A partir de ahí, España no volvió a sufrir y logró un merecido pase a la final.
En la lucha por el título, a la selección nacional le espera Alemania, que se convirtió en la primera finalista del Europeo tras un duelo frente a Inglaterra repleto de emoción en el Tychy Stadium, con remontadas de ambos equipos y mayor acierto germano en la tanda de penaltis final tras el empate a dos tantos.