"Un Celta arraigado a Vigo que haga más grande Galicia"

Este viernes 15 de diciembre ha dejado huella en la historia del Celta de Vigo. Según su presidente, Carlos Mouriño, una huella indeleble y la más transcendental en los casi 100 años de vida del club celeste, puesto que la entidad, el Concello de Vigo y la Xunta de Galicia han unido fuerzas para llevar a cabo dos proyectos fundamentales: la mejora definitiva de Balaídos y la construcción de una nueva ciudad deportiva en Mos.

 
El acto, que presentaba el proyecto 'Xuntos Construimos o Futuro', comenzó tras un almuerzo institucional con representaciones de varios estamentos políticos y del fútbol español, que no quisieron perderse un acontecimiento de tal magnitud para el club vigués. 
El primero en tomar la palabra fue el máximo mandatario del Celta, Mouriño, que enardeció a los allí presentes con sus palabras. "Hoy es el día más importante de la historia del Celta porque Concello y Xunta deciden colaborar en dos proyectos fundamentales. Estamos en una fecha que pasará a la historia como la más trascendente, sobresaliente e ilusionante de estos 94 años de vida", comenzó, añadiendo que "el Celta tendrá un estadio de Balaídos con características próximas a lo que necesitábamos y una gran ciudad deportiva en Mos".
"Será un gran proyecto y un orgullo para Mos y el área metropolitana de Vigo"
Entró en detalles sobre la nueva sede de la cantera celeste: "Contará con un pabellón, cinco campos de hierba natural, otros cinco de hierba artificial, pistas de tenis y pádel, una gran zona comercial y parajes naturales donde llevar a cabo actividades de ocio. Será un gran proyecto y un orgullo para Mos y el área metropolitana de Vigo y una incesante fuente de jugadores que alimenten a los equipos profesionales", prosiguió.
El granito de arena de las instituciones políticas será trabajar en los asuntos burocráticos. El Celta tiene una fecha en mente para inaugurar la ciudad deportiva: "La idea es iniciar los trabajos y tener preparados los campos para principios de 2019" y el principal objetivo de estos proyectos es algo por lo que la directiva celeste lleva varios años luchando: "Que Balaídos y la ciudad deportiva aporten al Celta ingresos atípicos ajenos a los generados habitualmente por el deporte. Tenemos claro que el proyecto principal es el deportivo y sabemos que las inversiones patrimoniales nunca serán a cuenta de la estabilidad deportiva", resaltó Mouriño. "Un Celta arraigado a Vigo que haga más grande a Galicia", concluyó.
"El día más trascendental de la historia del Celta"
Para Abel Caballero, alcalde de la ciudad olívica, este proyecto es de gran relevancia puesto que "el Celta tiene un hogar que se llama Balaídos, donde nació y donde queremos seguir disfrutando del Celta. Y este necesita un cambio radical. No lo juzguen hasta que no esté acabado. Balaídos será un estadio excepcional, donde nos sentiremos grandes", reiteró como ya hiciera en anteriores ocasiones. 
Solicitó de forma discreta el apoyo de otras instituciones, recalcando que "esta obra va a significar una nueva forma de entender el fútbol en la ciudad, con el compromiso firme por parte de las tres instituciones. Si alguien más se uniera, mejor" y pone fecha a la culminación de las mejoras en Río: "Lo haremos en tiempo, plazo y forma. A mediados de febrero tendremos acabada toda la obra de la Grada de Río". También quiso "reconocer el esfuerzo colectivo para llevar las metas de la forma en la que todos queremos entender al Celta y a Balaídos".
"A mediados de febrero tendremos acabada toda la obra de Río"
El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijoó, se mostró orgulloso del trabajo realizado por el Celta: "Me declaro seguidor de la actitud de este equipo. Todos somos dueños de la imagen de la ciudad y la comunidad y nadie puede sentirse satisfecho de que en los informativos deportivos el análisis del juego del Celta se vea afectado por las inseguridades de su estadio y la incertidumbre de su futuro", señaló.
 De este modo, "para garantizar que el Celta siguiese siendo digno embajador de Vigo, las ejecutivas teníamos la obligación de poner en marcha nuestras iniciativas para apoyar al club e intentar devolverle todo lo que le ha dado a la ciudad", indicó Núñez Feijoó, incidiendo en que "el club tuvo desde el principio nuestro apoyo. Queda lejos el 'no nos vamos, nos echan'. Creemos que es una buena noticia que finalmente pueda mantener su arraigo en Vigo y siga jugando en el mismo estadio que celebra sus victorias desde 1928. Hoy el Celta da un paso más para conseguir su sueño", concluyó el máximo dirigente de la Xunta de Galicia.