El objetivo ante el Unión Berlín, seguir con la puerta a cero
El talón de Aquiles celeste en la últimas temporadas ha sido su retaguardia, curso tras curso los goles en contra han sido una sangría que han impedido al Celta de Vigo pelear por objetivos más ambiciosos. Ninguno de los últimos entrenadores ha logrado cortar una hemorragia que el pasado curso terminó con un equipo que encajó 62 tantos, mejorando solamente los números de Huesca, Levante y Rayo Vallecano.
Sin excesivos cambios en la parcela defensiva, Fran Escribá ha priorizado el trabajo defensivo esta pretemporada consciente de que la calidad que el equipo atesora en ataque es suficiente para que genere goles. Hasta el momento el equipo ha dejado su puerta a cero ante el CD Lugo y el Lille, equipo que este curso jugará la Liga de Campeones.
Los dos próximos encuentros amistosos, ante el Unión Berlín, servirán de prueba para determinar la mejora defensiva de un equipo que desde que ascendió a Primera con Paco Herrera solo ha encajado menos de 50 goles en la temporada 2015/16, con Eduardo Berizzo. Ese curso el equipo marcó 47 goles y encajó 44, unos buenos números que acercaron al Celta a Europa.
El resto de temporadas se saldan, por orden cronológico, con 52, 54, 59, 69, 60 y 62 tantos recibidos, lo que muestra una tendencia negativa en el equipo que lleva tres temporadas siendo de los conjuntos que más goles encajan.
"Eso lo habíamos contemplado, el tema de crecer un poco en lo que estamos haciendo. Intentar ser un equipo que encaje menos, de no generar ocasiones por errores nuestros, sino porque son ellos los que las crean", relataba Fran Escribá tras el amistoso ante el Lille.
Para el técnico los encuentros ante el Unión Berlín serán una buena piedra de toque: "Los equipos alemanes, a nivel físico, empiezan su liga siempre antes y nos conviene estar intensos desde el principio, porque físicamente son muy fuertes", dos encuentros donde el Celta buscará seguir sin encajar goles, lo que sería una buena señal de cara al comienzo ante el Real Madrid.