Salomón Obama prepara su venganza en Mérida
Con la victoria del pasado miércoles todavía fresca, el Estadio Romano volverá a abrir sus puertas este domingo para recibir al Celta de Vigo. Además de ser el primer enfrentamiento entre ellos, este encuentro guarda un aliciente más que anecdótico: la oportunidad de Salomón Obama de redimirse ante su exequipo.
Pocos se habrán olvidado del gigante internacional con Guinea Ecuatorial que otrora deslumbró al mundo del fútbol de cantera. Junto a su hermano Fede, ambos lideraron al Atlético de Madrid en los torneos de categorías inferiores. Pero con su fútbol no sólo recibieron elogios, también críticas, la mayoría motivadas por su diferencia física con respecto al resto de competidores.
La gloria, no obstante, llegó demasiado rápida para los mellizos Obama. El central, tras finalizar su contrato el pasado verano con el cuadro colchonero, se encuentra sin equipo, mientras que el delantero, a pesar de seguir disfrutando del fútbol, inauguró un periplo por el fútbol español que le ha llevado ahora a Mérida.
De Vigo a Mérida
Salomón puso rumbo a Vigo en enero de 2019, donde apenas jugó cuatro minutos con el Celta B en la derrota por 2-0 frente al Real Madrid Castilla. Salió en el 86' en detrimento de Ros en su único momento de leve protagonismo sobre el césped. Su falta de oportunidades se tradujo en un nuevo cambio de aires. El Mérida apostó por él en agosto, donde llegaría cedido.
"Muy dinámico, puede jugar en cualquier posición de ataque. Se desenvuelve bien tanto en banda como de segundo punta. Desequilibrio y frescura en la línea de arriba", destacó Rubén Andrés, director deportivo de la entidad extremeña, en el momento de su fichaje.
Ante La Nucía, el ex del Atlético de Madrid debutó en la Copa del Rey en el 54', pero fue sustituido en la prórroga, en el minuto 97', cuando Diego Merino decidió darle la oportunidad a Cristo. Los penaltis llevaron al Mérida a una nueva ronda del torneo del KO, una circunstancia que abre una nueva vía a la venganza de Obama.