Aspas: fútbol callejero, de porterías hechas con mochilas y balones de papel y celo
Iago Aspas es uno de los protagonistas de un nuevo vídeo promocional de LaLiga y un famoso juego de fútbol, el FIFA. El delantero del Celta de Vigo recuerda sus inicios en Moaña, sus partidos de niño en la calle hasta la noche. Sus destrozos en casa jugando con sus hermanos con un balón de papel y celo o como en cada partido en el colegio se jugaban la vida en cada balón.
"Para mí lo es todo, he pasado muchísimos años jugando todos los días jugando en el antiguo campo como en la playa hasta que llegaba la noche y me silbaba mi padre para ir a cenar", así recuerda su infancia en Moaña Iago Aspas.
El delantero celeste confiesa que "esa pillería que tengo, el no dar un balón por perdido, esa forma de estar siempre al 200% y ese fútbol intuitivo de la calle me ha servido para aprender casi todo lo que sé hoy en día" algo que le debe al poder haber disfrutado de su niñez jugando en la calle con sus hermanos y amigos.
Iago Aspas tiene claro que "es lo que he mamado desde pequeño, el poder jugar en la calle, haciendo las porterías con mochilas en el colegio cuando los mayores tenían el campo ocupado. Ahí cada uno se jugaba casi la vida en cada pelota", recuerda el moañés.
Otro de sus recuerdos es cuando "le rompía la ventana a mi madre o un jarrón por jugar en el pasillo con una pelota hecha en casa de papel y celo con mis hermanos", entre los que se encuentra el también jugador de fútbol Jonathan.
"La pillería y el fútbol intuitivo de la calle ⚽️😏 me han servido para aprender casi todo lo que sé hoy en día".
El fútbol callejero regresa a #FIFA20 con #VOLTAFOOTBALL. 🎮 ¡Y qué mejor embajador que el de Moaña! #MyPitch #VOLTA@LaLiga @EASPORTSEsp pic.twitter.com/Ha0o8Nte1C
— RC Celta 🏡 #QuedaNaCasa #IstoTaménÉAfouteza (@RCCelta) April 16, 2020
De ese fútbol de calle al profesional hay un gran trecho que Aspas tuvo que recorrer no sin dificultades, como muchas veces ha reconocido, ya que su carácter se la ha jugado en más de una ocasión: "Con el paso de los años he ido mejorando, he ido entendiendo de qué va esto hoy en día en la élite".
El celeste también tiene claro que hay un recuerdo que jamás podrá olvidar y que siempre le quedará grabado en su cabeza: "El debut en Balaídos y poder salir a hombros es algo que siempre me quedará grabado en la retina para siempre", una tarde en la que sus dos goles ante el Alavés salvaron al Celta de un posible descenso a Segunda B que hubiese supuesto la desaparición del club.