El futuro de Olaza en Vigo: el Celta trata de renegociar con Boca su continuidad

Lucas Olaza se ha convertido en protagonista inesperado del mercado de fichajes del Celta de Vigo debido a su posible salida este mes de enero. El club quiere seguir contando con el futbolista charrúa lo que resta de temporada, pero no a cualquier precio.

En el contrato de cesión del defensor uruguayo aparece una cláusula por la que el conjunto olívico debería ejercer la opción de compra negociada a final de la pasada campaña, cuando se logró su continuidad, de unos cuatro millones de euros si Olaza juega la mitad de los encuentros de LaLiga Santander, y si el club logra su permanencia en primera división. Algo relativamente asequible tras concluir la primera vuelta con 23 puntos.

Hasta el momento, el lateral ha disputado un total de 17 encuentros y si jugara este domingo ante el Éibar estaría muy cerca de jugar la mitad de los partidos del campeonato lo que significaría que el club celeste tendría que pagar a Boca Juniors esa opción de compra que pactaron cuando el club celeste logró renegociar su continuidad tras el partido ante el Mallorca. En ese momento el Celta comunicó que no había llegado a un acuerdo con Boca Juniors para que Olaza jugase más allá del 30 de junio y tras mantener nuevas conversaciones con las que se logró la continuidad de Olaza cedido hasta final de curso y una temporada más, la actual.

Es por este motivo por el que el Celta de Vigo está negociando, una vez más, con el club de origen de Lucas Olaza para eliminar esta cláusula o renegociarla para que las condiciones sean más favorables para el equipo olívico teniendo cuenta que no puede afrontar el pago de esa cuantía a final de la actual temporada.

El Celta está tratando de negociar con Boca para que Olaza continúe defendiendo la elástica celeste, que es lo que desea, pero no a cualquier precio. El club espera poder llegar a un acuerdo con Boca Juniors para rebajar el precio de la opción de compra, de unos cuatro millones de euros. En el caso contrario estaría dispuesto a devolver al lateral zurdo a Argentina o quedárselo sin jugar para no verse obligado a final de curso a tener que afrontar un traspaso que en las circunstancias económicas actuales, con una importante reducción de ingresos provocada por la pandemia del coronavirus, en A Sede no consideran nada ventajoso.

Si las conversaciones no llegaran a buen puerto, el jugador tendría que abandonar el Celta en este mercado de fichajes invernal produciéndose así una salida muy importante teniendo en cuenta que Eduardo Coudet perdería a uno de sus fijos y sólo se quedaría con Aarón Martín, recién llegado en este mercado, y Fontán para ocupar esta demarcación.

"Lo que hablé hoy con Lucas es que esté lo más concentrado para el partido (ante el Éibar). Después, que se solucione lo más rápido, es una situación económica entre los clubes que no puedo intervenir. No puedo obligar al club a hacer un esfuerzo que no puede hacer ni ayudar desde algún lado", ha reconocido Coudet este sábado en la previa del partido del domingo.