Carlos Mouriño, muy enfadado con el Benfica: ¿Hay caso Cervi?

El culebrón del mercado estival de fichajes apunta a un nombre, el de Franco Cervi. El volante argentino, prioridad número uno para Eduardo Coudet y con el que ya existe un acuerdo total, sigue siendo jugador del Benfica y no se espera que esta situación cambie en un corto plazo de tiempo. Las nuevas exigencias económicas del Benfica, que solicita dos millones de euros más, han estancado las negociaciones. Desde la Radio Galega se apunta a que el enfado de Carlos Mouriño, presidente y máximo accionista del Celta de Vigo, es muy importante con el cuadro lisboeta por romper el acuerdo que ambos clubes habían alcanzado en enero.

En Ao Contraataque, Terio Carrera aseguró que el presidente y máximo accionista del Celta de Vigo está muy enfadado con la dirección del Benfica por no haber respetado el acuerdo de 4 millones más dos en variables que habían alcanzado en enero, cuando el jugador argentino estuvo a punto de vestir la camiseta del Celta. El volante zurdo era una petición expresa de Eduardo Coudet, que se encargó de convencer a su compatriota para recalar en Vigo.

El pacto con el jugador, el gran aval con el que cuenta el Celta, sigue vigente. Carlos Mouriño aseguró que Franco Cervi "tiene una fe ciega en el Chacho y quiere jugar en el Celta. Eso es un paso muy grande" pero también advirtió que no creía que fuese el primer fichaje de este verano. Esto se debe a la negativa del Celta de ceder a las nuevas condiciones que exige el Benfica, que solicita dos millones de euros más en fijo.

Aunque desde Portugal aseguraban que el acuerdo estaba cercano desde el Celta siguen siendo muy cautos. La operación se va a dilatar en el tiempo debido a la dureza de los dos negociadores. Ni Luís Filipe Vieira ni Carlos Mouriño quieren dar su brazo a torcer. Una situación que se puede enquistar a pesar de ser un jugador sin apenas minutos en el Benfica.