Felipe Miñambres y el Celta, una relación con una complicada continuidad
Salvo giro importante en los próximos meses Felipe Miñambres no continuará una temporada más al frente de la dirección deportiva del Celta de Vigo. El actual responsable de la secretaría técnica de cuadro celeste está afrontando la última ventana de transferencias este mes de enero ya que todo hace indicar que en verano el maragato y el Celta separarán sus caminos de forma definitiva. Tal como ha podido saber ElDesmarque la decisión por ambas partes está bastante madurada y en estos momentos la posibilidad de que Felipe Miñambres renueve una temporada más como director deportivo tiene pocas opciones de hacerse realidad. Si la situación no cambia Miñambres dejará el club en el que ha trabajado en los últimos seis años tras llegar en el curso 2016/17 procedente del Rayo Vallecano.
Será este verano cuando el contrato del director deportivo, nacido en Astorga hace 56 años, concluya. El 30 de junio terminará su vinculación con el Celta de Vigo, al igual que la de su mano derecha, Ángel Medina. El madrileño aterrizó en Vigo de la mano del maragato y se irá del club vigués con él este verano. La relación entre el club y su dirección deportiva sigue siendo buena pero el desgaste ha ido haciendo mella en las dos partes. Su capacidad para adaptarse a las necesidades del Celta, un club donde la directiva toma las decisiones importantes en materia de fichajes le permite mantener opciones de sumar una séptima temporada en Vigo pero es una situación que en estos momentos tiene menos visos de hacerse realidad.
La temporada pasada Felipe Miñambres y Ángel Medida estuvieron cerca de decir adiós al Celta. El club sondeó varios directores deportivos recibiendo el no por respuesta. Finalmente Miñambres y el club llegaron a un acuerdo para prorrogar la vinculación de él y Ángel Medina una temporada más, hasta junio de 2022. La crisis económica provocada por la pandemia del coronavirus, con el mercado paralizado en todos los aspectos, fue determinante para prolongar un año más la estancia del leonés en Vigo.
Este curso la situación es un poco distinta ya que desde el principio del año tanto el club como el director deportivo eran conscientes de que su relación tenía muchas opciones de finalizar este próximo mes de junio. Lograr que las dos partes negociasen una sexta temporada es complicado. Felipe Miñambres, muy cómodo y asentado en Vigo, está dispuesto a emprender un nuevo reto en otro equipo ahora que su relevancia en la entidad viguesa ha disminuido a favor de Eduardo Coudet. El técnico argentino tiene un papel preponderante en el capítulo de fichajes, superior al de cualquier otro técnico contratado por Carlos Mouriño.
La llegada al club de Alfredo Merino, responsable de captación del Celta para las categorías inferiores, tras muchos años de trabajo en el Real Madrid también ha supuesto un gran cambio en el trabajo de la dupla Miñambres-Medida. Ángel Medina ha sido el principal arquitecto del Celta B en las últimas temporadas pero en este mercado invernal que aún está abierto su rol ha cambiado de forma notable.
Muchas llamadas recibidas en Príncipe ofreciendo jugadores para el Celta B o el Juvenil de División de Honor tenían como destino a Medina. Sin embargo estos asuntos han sido delegados a Alfredo Merino como máximo responsable de las contrataciones en las categorías inferiores. Prueba de ello es la llegada al Juvenil de Aitor Mañas, delantero cedido por el Real Madrid el pasado mes de diciembre para suplir la baja de Álex Comparada. Merino se ha convertido en un hombre fuerte en el organigrama del club tras recalar en Vigo este pasado verano.
