El juicio a Santi Mina por presunta agresión sexual modifica sus fechas
Santi Mina, delantero del Celta de Vigo, sigue pendiente de la celebración del juicio por presunta agresión sexual, delito por el que la fiscalía solicita ocho años de cárcel por los hechos sucedidos, y de los que se acusa, en verano de 2017 en la localidad almeriense de Mojácar. Las fechas del juicio han variado y finalmente serán los días 28, 29 de marzo y el día 4 de abril cuando Santi Mina sea juzgado en la sección III de la Audiencia de Almería por los delitos de los que le acusa la víctima de esta presunta agresión sexual.
Este cambio de fechas impedirá, del que informa el Diario Atlántico, impedirá que Santi Mina con casi total seguridad, pueda estar presente en el partido de Liga de la jornada 30 en el Estadio de Balaídos. El club, tras hacerse pública esta denuncia, siempre ha mantenido la misma postura. Respeta la presunción de inocencia del delantero. Además ha decidido protegerlo evitando que tenga que comparecer en entrevistas o ruedas de prensa más allá de las realizadas por el propio club o por LaLiga, donde solo se le pregunta por cuestiones deportivas.
Los hechos que denuncia la víctima sucedieron en 2017. Esta joven, que denunció la presunta agresión, relató que en la madrugada de ese 16 de junio Santi Mina aprovechó que su amigo, el también futbolista David Goldar, ahora en el Ibiza y también canterano del Celta de Vigo, se había ido con una mujer a la caravana que tenía estacionada en las proximidades de una discoteca de Mojácar para, también él, satisfacer su "apetito sexual" a pesar de la "manifiesta voluntad contraria" de la presunta víctima. La Fiscalía señala que el vigués entró en la caravana "completamente desnudo, sorprendiendo a los otros manteniendo relaciones sexuales".
Fue entonces cuando el acusado presuntamente le dijo que le gustaba "mucho y directamente introdujo su pene desnudo y erecto en su boca sin preguntar" y que deberían "hacer algo", a lo que ella se negó "consiguiendo sacar su miembro de la boca. A continuación, el procesado la empujó hacia atrás en la cama agarrándola fuertemente del brazo derecho, introduciéndole tres dedos de la mano derecha en la vagina" como relata el documento de acusación del Ministerio Fiscal y que serán juzgados los días
A consecuencia de esta presunta agresión, la víctima presenta en la actualidad, según Europa Press, sintomatología ansiosa y depresiva grave y su vida cotidiana ha resultado "muy afectada", ya que sufre trastorno de estrés postraumático crónico. Por estos presuntos hechos, el Ministerio Público interesa una pena de ocho años de prisión por un delito de agresión sexual, por el que también solicita una orden de alejamiento de 500 metros durante diez años, así como que se le imponga la medida de libertad vigilada durante otros diez años al futbolista. David, Goldar está citado como testigo en este juicio.