La última visita del Madrid con González Fuertes: Tres penaltis, un gol anulado y expediente a Aspas
El Real Madrid regresa a Balaídos, un estadio donde se encuentra cómodo ante un Celta de Vigo que no le gana desde el 11 de mayo de 2014. Son ocho los encuentros consecutivos en los que el conjunto merengue ha sumado al menos un punto ante los celestes. En siete de ellos se alzaron con la victoria invirtiendo la tendencia que había hecho de Balaídos un campo casi inexpugnable para el cuadro madrileño. La última de ellas provocó un gran revuelo entre el celtismo ya que González Fuertes, árbitro protagonista de más que un escándalo ante el Celta, soliviantó a la afición viguesa con su doble vara de medir en muchas acciones del partido disputado este pasado mes de abril.
Tres penaltis cometidos por Nolito, Murillo y Kevin permitieron al Real Madrid anotar sus dos goles. Dituro detuvo uno de los tres lanzamientos de Karin Benzema. Además desde la pantalla de VAR decretó fuera de juego de Iago Aspas al considerar que el moañés molestaba a Alaba en su intento de despejar el remate de cabeza de Thiago Galhardo.
La primera acción polémica del encuentro fue el penalti señalado a Nolito sobre Militao. El gaditano rozaba por detrás al central brasileño, este se iba al suelo, y Gonzáles Fuertes no dudaba al señalar la pena máxima. Una acción donde el contacto es claro pero en la que la intensidad del mismo dejó muchas dudas. Benzema no falló y puso el 0-1 en el minuto 19.
La siguiente acción polémica fue el gol anulado a Thiago Galhardo. El delantero brasileño cabeceaba al palo un centro de Nolito. El balón se paseaba por la línea de gol con Aspas y Alaba yendo a por el esférico. La pelota acabó entrando pero desde la sala VOR llamaron a González Fuertes para que viese la repetición de la jugada. El colegiado asturiano entendió que Aspas molestaba al central austríaco impidiéndole despejar la pelota aprovechándose de haber salido en fuera de juego en el testarazo de Thiago Galhardo. Anuló el tanto que hubiese supuesto el 1-1.
Con 1-1 al descanso tras un gol de Nolito González Fuertes señaló a favor del Real Madrid un nuevo penalti. En esta ocasión de Jeison Murillo sobre Rodrygo. El habilidoso atacante brasileño intentó regatear al central colombiano. Murillo puso la pierna y cuando Rodrýgo vio que no iba a ser capaz de superarlo dejó atrás la suya para sentir el contacto e irse al suelo. Murillo pecó de inocente ante el atacante merengue. Matías Dituro adivinó el lanzamiento de Benzema y detuvo su disparo en el minuto 63.
Sin tiempo para celebrar la parada de Matías Dituro Gonzáles Fuertes volvió a señalar otro penalti en contra del Celta. Mendy recortaba a Kevin Vázquez. El francés se iba encima del canterano celeste arrollando al defensa celeste. Mendy inmediatamente se fue al suelo y Gonzalez Fuertes no dudó ni un instante. Un tercer penalti en contra. En esta ocasión Benzema no fallaba y superaba a Matías Dituro en el minuto 69. Lo intentó de todas las maneras el Celta que además de los tres penaltis en contra sufrió la actuación estratosférica de Thibaut Courtois. El belga impidió varios goles celestes con paradas al alcance de muy pocos.
Iago Aspas criticó duramente el arbitraje de González Fuertes. "Los dos primeros han sido penaltitos, pero han sido. El último para mi punto de vista no ha sido. Mendy arrolla a nuestro defensa y al final es falta nuestra. Solo ha faltado que pitara un penalti al final y que lo tirara el amigo Pablo. Parecía que buscaba y quería el hat trick de Benzema". "Mendy es el que va contra Kevin. Se va a un lado y lo arrolla", denunció. Unas palabras que le valieron la apertura de un expediente disciplinario extraordinario por el que se le solicitaba una sanción de cuatro a doce partidos. Finalmente el juez instructor archivó la causa remitida por el Comité de Integridad y Aspas no sufrió castigo.
