Amargo final en Riazor

Sin nada en juego más allá de finalizar la temporada con dignidad, el Deportivo recibió al Villarreal en Riazor con la mente puesta en la planificación de la temporada que viene. El encuentro sirvió de despedida en casa para varios de los futbolistas que saltaron esta tarde al municipal coruñés con la camiseta blanquiazul, pues unos cuantos no formarán parte de la primera plantilla herculina el próximo curso. Enfrente, el Dépor se encontró a un Villarreal necesitado de lograr un triunfo para certificar su presencia en la próxima edición de la Europa. El desenlace final se ajustó a lo previsto: el 'submarino amarillo' puso el juego y también los goles.

Seedorf apostó de inicio por Fernando Navarro como central, Valverde escorado a la izquierda en la línea de medios y Adrián ejerciendo como mediapunta, abriéndole un hueco en el once a Borja Valle. Tres cambios respecto a la alineación titular que sumó un punto in extremis en O Noso Derbi. Por parte del equipo castellonense, el canterano Raba regresó a los planes de Javier Calleja tras ocupar el banquillo de suplentes frente al Barcelona. 
El choque arrancó de la peor manera posible para los intereses locales: no habían transcurrido dos minutos de juego cuando Samu Castillejo se sacó de la manga un zapatazo extraordinario con su pierna izquierda que se coló por la escuadra derecha de la meta defendida por Rubén Martínez. El golpeo, extraordinario, convirtió en ineficaz la estirada del arquero de Coristanco.
El Villarreal no solo no se conformó con el 0-1, sino que se fue hacia arriba intentado liquidar el partido por la vía rápida. Bacca en dos ocasiones pudo hundir al Deportivo antes de alcanzar el minuto 10. 
En el 11', Borja Valle dispondría de una buena oportunidad para firmar las tablas, pero su cabezazo a centro preciso de Juanfran fue detenido sin excesivos problemas por Sergio Asenjo.
El encuentro se abrió con el paso de los minutos: Bacca erró su tercera ocasión clara de la tarde y el Deportivo comenzó a crear problemas a la zaga visitante gracias a la continua movilidad de Lucas Pérez, Adrián López y Borja Valle.
En medio del intercambio de golpes, Trigueros encontró oro en el corazón del área blanquiazul. El Villarreal desbordó por su banda izquierda, colgó la pelota hacia el punto de penalti y allí apareció libre de marca el centrocampista de Talavera de la Reina. La excesiva pasividad de Guilherme ayudó a que el jugador visitante rematase a puerta con comodidad.
Si el brasileño no siguió a Trigueros en el 0-2, qué decir de Luisinho en el 0-3 marcado por Samu Castillejo. El extremo malacitano le ganó la espalda al lateral luso y batió a placer a Rubén Martínez. Al descanso se llegaría con goleada en contra y sonido de viento en la grada.
El segundo tiempo se inició con una llegada muy clara de Fornals y prosiguió con el primer gol deportivista, el anotado por Borja Valle a la salida de un córner. El lanzamiento de esquina fue rematado por Lucas Pérez y su compañero en la delantera metió la pierna sobre la línea de gol para enviarlo al fondo de la red.
La recta final del choque sirvió para asistir al debut del juvenil Mujaid, la única alegría par la afición coruñesa junto al rendimiento de Borja Valle. El punta marcó su segundo gol en el 87', haciendo bueno un pase de la muerte de Adrián. Y Bacca anotaría el definitivo 2-4 in extremis. La última tarde de Primera en Riazor resultó amarga.  
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