Con el foco en Ontiveros
La extraordinaria primera mitad de Javi Ontiveros en Riazor coloca al extremo del Málaga en el primer plano mediático de cara a la resolución de la eliminatoria en La Rosaleda, en poco más de 24 horas (21.00h, Movistar Partidazo). Es, probablemente, el futbolista más en forma de cuantos participan en las dos semifinales por el ascenso, y el Deportivo lo sabe. También era consciente de ello en la ida, pero Ontiveros condicionó la contienda con su inmensa calidad, aunque los coruñeses lograron sobreponerse en la segunda parte.
Acostado en la banda izquierda, el dorsal 17 encontró situaciones de uno contra uno de las que siempre salió vencedor. La primera: un recorte a Fede Cartabia en una baldosa que se saldó con un centro templado al área cabeceado al fondo de la red por Luis Hernández.
La segunda, un disparo desde unos 25 metros que no encontró oposición ni en la cobertura (David Simón y Álex Bergantiños) ni en la portería. Cuando Dani Giménez divisó la pelota, la misma ya había cogido suficiente efecto como para resultar imparable.
Ontiveros capitaliza el juego de ataque del Málaga
La producción de Ontiveros no se quedó ahí. En la segunda mitad, la individualidad más destacada del Málaga dispondría de un libre directo muy escorado que estrellaría contra la escuadra. La madera evitó un tanto que pudo resultar decisivo, porque los hombres de Víctor Sánchez del Amo poco a poco fueron desapareciendo del partido y los futbolistas herculinos se hicieron fuertes, llegando a completar una remontada para el recuerdo.
Se espera que Martí repita con el plan de la segunda parte en A Coruña para frenar a la gran estrella malaguista. Pedro Sánchez sería el encargado de ayudar a Bóveda o David Simón en tareas menos gratas. Protegerse de Ontiveros es una necesidad para el Dépor.