Uche Agbo y el privilegio de jugar con Bergantiños

Es un secreto a voces que, salvo giro ineperado en el último momento, Uche Agbo no continuará en el Deportivo. El nigeriano llegó al Dépor en el mercado de invierno de la temporada 2019/20 y fue de menos a más. Procedente del Standard de Lieja, el centrocampista resultó clave el renacer de un equipo que no pudo finalmente conseguir la salvación y descendió a Segunda B.

A Uche se le quedó clavada la espinita de esa lesión de ligamentos ante el Tenerife que no le permitió acabar la competición y tuvo que ver desde la grada el triste desenlace. Por ello, no se bajó del barco y regresó tras las vacaciones con la convicción de ayudar al Dépor en su regreso al fútbol profesional. Firmó un contrato por cuatro temporadas y arrancó muy fuerte el campeonato.

Sin embargo, el coronavirus y una nueva lesión hicieron bajar el rendimiento de un jugador que reconoce que "podía haber aportado más". Sobre todo, cuando le preguntamos a Uche por un balance de la temporada, se acuerda y mucho "del partido en el campo del Coruxo". El nigeriano arrancó despistado y no se olvida. Al igual que tampoco se olvida de la humanidad del vestuario que le ha tocado compartir en esta difícil temporada.

Bergantiños, "el más completo"

Pero si hay un jugador que ha dejado huella en el paso de Uche por el Dépor, ese ha sido Álex Bergantiños. "Juega con los pies y con la boca. Está pendiente de todo en todo momento. Es el más completo", confiesa Agbo a ElDesmarque. Parece que todo lo bueno que se ve del capitán desde fuera también se ve desde dentro. Y lo reconocen, incluso, los que parecen más introvertidos y que comparten demarcación sobre el verde, como el propio Uche.

Está claro que vaya a donde vaya, Uche se lleva consigo los buenos consejos de Bergantiños y un espejo en el que mirarse. El nigeriano tiene hambre de fútbol y muchas ganas de ofrecer su verdadero potencial de manera continuada. Siente tristeza al no poder hacerlo ahora en el Deportivo pero su ficha es demasiado elevada para las arcas blanquiazules. Además, a sus 25 años, el mediocentro cuenta con otras ofertas que también verían con buenos ojos desde el propio Deportivo para ingresar dinero. Lo que sí es seguro es que para Agbo ha sido "un privilegio" llevar este escudo y, por supuesto, jugar al lado de Álex Bergantiños.