El simpático' Pfaff, el mejor portero belga y un 'Reality Show'

Jean Marie Pfaff no sólo es el mejor portero de la historia de Bélgica, sino también lo fue del mundo en 1987, siempre acompañado por esa sonrisa que inspiró su apodo de 'El Simpático', con actuaciones memorables en el Bayern Múnich, en la Eurocopa 1982 y sobre todo en el Mundial 1986.

Iñaki Dufour
"Lo que logré en el Bayern y con Bélgica en México fue gracias al esfuerzo. Siempre quería mejorar; ser el mejor", expuso Pfaff en un repaso a su carrera en la página web de la UEFA, construida desde un trabajo constante, desde una infancia humilde, en una caravana junto a sus once hermanos, en Lebbeke, en la región de Flandes.
A los once años, cuando murió su padre, se hizo una promesa: sería un buen portero. Lo consiguió. Antes trabajó mucho, en una oficina de correos, en un molino, en una fábrica textil y, con 18 años, fichó por el KSK Beveren, mientras lo compaginaba con su empleo y recorría 50 kilómetros en bici para cada entrenamiento.
Después, tuvo una tienda de deportes, mientras se afianzó en el Beveren. Lo consiguió. Fue campeón de la Liga y la Copa de su país, fue nombrado mejor jugador en Bélgica en 1978 y ya estaba reafirmado como guardameta titular en la selección belga, con la que fue subcampeón de Europa en 1980. Alemania le apartó del título.
En 1982 le fichó el poderoso Bayern Múnich. Su debut fue con derrota y con un gol en propia puerta ante el Werder Bremen, aunque sus espectaculares paradas transformaron aquel estreno en una carrera magnífica con el club alemán, con el que ganó tres Bundesligas y fue subcampeón de la Copa de Europa contra el Oporto.
Y en 1986 acaparó la atención de todo el mundo. En el Mundial de México de aquel año, su espectacular actuación en la tanda de penaltis contra España, en los cuartos de final, le dio aún más protagonismo. Eliminado en semifinales por la Argentina de Diego Armando Maradona, aquel éxito perdura aún en la historia del fútbol belga, a pesar de que el talento de la nueva generación exija más.
Lierse o Trabzonspor, tras su marcha del Bayern en 1988, cerraron su carrera como guardameta con 36 años, a la que dio continuidad como entrenador durante un breve tiempo y a la que siguió la televisión, como la estrella de un 'Reality Show' llamado 'De Pfaffs', que durante una década mostró la actividad en su casa cerca de Amberes.
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