Rakitic y su lado más personal: "Mis padres pasaban hambre por comprarme mis botas"
Ivan Rakitic, centrocampista del FC Barcelona, concedió una extensa entrevista en Universo Valdano en la que repasó, desde sus inicios con su familia hasta su duro día a día en el Camp Nou.
En ElDesmarque repasamos las palabras más destacadas, en el lado personal, del croata:
Un nuevo proyecto solidario: "Estoy intentando crear una escuela en Sevilla. Aprendí en casa, mis padres no han crecido en un entorno muy fácil, me acuerdo mucho que mis padres lloraban, que no teníamos para comer, pero preferán acostarse con un poco de hambre para poder comprarme unos zapatos para seguir entrenando. Eso me enseñó, y por ello intento transmitir esa pasión a la gente".
Su infancia en el colegio: "Desde pequeño era un loco del fútbol. Recuerdo qe tenía un juguete, la pelota. No me compraban otra, porque no había para más. Yo iba con la pelota a todos sitios. Desde el primer día quería terminar el colegio, le dije que iría los nueve años que debía y ni un sólo día más".
Su pasión por el fútbol: "Me daba igual el sitio. Yo sólo quería coger el balón y chutar. Iba con mi hermano a los entrenamientos del equipo del pueblo y a los cuatro años ya estaba compitiendo con gente mayor que yo".
Su padre, también futbolista: "La pasión por el fútbol llega de mi padre. Cuando llega un partido, él está más nervioso que yo. Mi padre estaba a punto de ser profesional, jugó en la selección de Yugoslavia, pero tenía la oportunidad de salir de la zona, no vivía del fútbol y se buscó la vida en Suiza trabajando. Una vez llegó al pueblo, el alcalde le dijo que jugase en el equipo de allí. Mi padre estaba encantado".
Su inicio en el Basilea: "Con ocho años, jugaba torneos contra el Basilea. Ellos eran los más grandes. En la final jugamos contra ellos, le ganamos 2-1 y marqué los dos goles. Ganamos el torneo y justo después de la final el entrenador se acercó a mi padre y les ofreció una prueba. Así empezó todo. Mi padre se iba antes del trabajo para llevarme a los entrenamientos. Intentaron que me quedase dos años más para cobrar algo por mi fichaje, estuve un año sin jugar casi, pero se llegó a un acuerdo para que me pudiese ir antes al Basilea".
La decisión de su selección: "No quise escuchar a nadie. Quería ser yo mismo. Fue complicado explicar que no iba en contra de Suiza, sino a favor de mi gente de Croacia. No me gustaría ver a otro joven en mi lugar. No ha sido fácil, he recibido muchas llamadas, muchos mensajes... espero que algún día me entiendan".