2-0; Piqué, min 90.
1-0; Braithwaite, min 94.
Leo, ahora o nunca
Cuatro días después de enfrentarse en LaLiga Santander, FC Barcelona y Sevilla FC vuelven a verse las caras en la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey, este miércoles a las 21.00 en el Camp Nou, con el acceso a la final en juego, y con un conjunto azulgrana crecido que intentará remontar el 2-0 del cuadro de Julen Lopetegui de la ida.
El Barça acude al partido con confianza tras haber ganado al Sevilla (0-2) el pasado sábado: victoria liguera, reivindicación del equipo y asalto a la segunda plaza de la clasificación. Con este panorama, los barcelonistas afrontan la misión de darle la vuelta a la eliminatoria.
Lo intentarán con las ausencias por lesión de los atacantes Ansu Fati y Philippe Coutinho y la duda del centrocampista Miralem Pjanic, que no jugó el último partido de Liga por unas molestias en el tobillo derecho.
Sin embargo, no contaban con la recuperación milagrosa del centrocampista Pedri González, que abandonó lesionado el último encuentro por un estiramiento muscular en el sóleo de la pierna izquierda y que hoy se entrenó con normalidad.
En defensa, a la baja de Sergi Roberto se suman las molestias de Ronald Araujo, que se retiró con problemas del partido del pasado sábado y que este martes se entrenó al margen con el Barcelona.
El Sevilla viaja avisado de que deberá estar al cien por cien para competir el pase a la final al conjunto azulgrana y hacer valer la renta lograda en el partido de ida disputado en el Sánchez Pizjuán el pasado 10 de febrero.
Ésta será la cuarta cita entre los dos equipos en lo que va de temporada y la segunda en cinco días, después de que el pasado sábado se vieran en el estadio de Nervión en el encuentro de la segunda vuelta de LaLiga, que se adjudicó el de Ronald Koeman por 0-2, con lo que le devolvió al de Julen Lopetegui ese 2-0 que defiende ahora en la Copa.
El otro partido que disputaron ambos en esta campaña fue en la quinta jornada de LaLiga y entonces el Sevilla logró el pasado octubre un empate a uno en el Camp Nou, con un gol del neerlandés Luuk de Jong que adelantó a los sevillistas a los ocho minuto y otro del brasileño Coutinho dos minutos después que equilibró el marcador.
Ese resultado clasificaría al Sevilla para la final que se disputará a mediados del próximo abril precisamente en la capital andaluza, en el estadio de La Cartuja, pero el equipo de Lopetegui no dejó un buen sabor de boca el pasado sábado ante un rival que se mostró superior.
También está en el recuerdo la eliminatoria de Copa de hace tres años, en los cuartos, la anterior vez que se vieron en este torneo, cuando los sevillistas lograron un 2-0 en la ida pero fueron apeados con el 6-1 en la vuelta, lo que pone en alerta máxima a los hispalenses.
El técnico guipuzcoano insiste en que lo hecho en la ida del Sánchez Pizjuán era un resultado provisional de un partido de 180 minutos como mínimo que tendría continuidad en el Camp Nou, con lo que augura muchas dificultades ante el potencial del adversario.