Xavi Hernández tiene un lío de celos en el vestuario del Barça, harto del ‘niño mimado’

Xavi Hernández tiene un problema grave con un jugador del Barça, que es un ‘apestado’ en la plantilla, y ni siquiera tiene contacto con el resto de compañeros en el vestuario. Porque como ha adelantado el diario ‘El Nacional’, Ferran Torres ha colmado con la paciencia de todos los futbolistas, debido al bajo rendimiento que ha ofrecido, y consideran que no merece seguir teniendo minutos y disponiendo de continuidad, porque no aporta nada.

Una opción que comparten con gran parte de la afición, que ha llegado a abuchear al internacional español, y también con Joan Laporta y Mateu Alemany, que se arrepienten de haberlo fichado, y ya le buscan un destino. Y entre los principales detractores del ‘11’ se encuentran Robert Lewandowski o Ansu Fati, solo por poner algunos ejemplos, aunque a ellos ahora se ha sumado uno nuevo, como ha informado el citado periódico.

Porque Raphinha también está harto de tener que compartir el protagonismo con el ex del Manchester City. Sin ir más lejos, en el choque de ida de la ronda previa de la Europa League fue sustituido pese a estar siendo de lo poco salvable frente al Manchester United, donde marcó un gol. De manera sorprendente, el técnico catalán decidió retirarle del terreno de juego para dar entrada al de Foios, una decisión muy polémica.

Y el cabreo del brasileño fue de libro, como captaron las cámaras, propinando una serie de puñetazos al banquillo. Algo similar ocurrió el pasado fin de semana, ante el Valencia, un encuentro en el que Ferran estaba teniendo una tarde para el olvido, pasando desapercibido por completo, y cometiendo errores de bulto, que casi acaban con goles en contra. Para redondear su actuación, falló un penalti. No obstante, aún y así jugó los 90 minutos.

Raphinha, en cambio, volvió a ser reemplazado, pese a estar jugando mejor que Torres, y haber anotado el único tanto del partido, que sirvió para llevarse los tres puntos. Esta vez no montó ningún escándalo, pero su cara reflejaba que no estaba para nada de acuerdo con esta decisión.