Araujo y Busquets se encararon con los ultras que intentaban colarse en el túnel de vestuarios: la Policía y los compañeros, intercedieron
La celebración del FC Barcelona de su título liguero fue algo accidentada. La rivalidad desde hace años con el equipo perico llegó a su máximo extremo cuando tras el pitido final los jugadores culés se pusieron a celebrar sobre el césped. Un grupo de ultras se coló en el campo y los futbolistas tuvieron que salir corriendo, pero Sergio Busquets y Ronald Araujo decidieron plantarles cara.
Todos los jugadores junto al cuerpo técnico estaban en el centro del campo en un círculo bailando, pero se percataron de que algo no iba bien y todos empezaron a correr hacia el túnel de vestuarios.
Araujo y Busquets plantaron cara a los ultras
La Policía intentó hacer una barrera en la entrada para que nadie de los que habían invadido el terreno de juego se colase, pero este perímetro no fue infranqueable y alguno que otro se coló en la entrada.
Lejos de huir del conflicto y encerrarse en el vestuario. Sergio Busquets y Ronald Araujo se encararon a los pocos que accedieron a estas inmediaciones como así lo grabó las cámaras de ESPN. Compañeros como Marcos Alonso o Ferran Torres, junto a la Policía, intentaron llevárselos de ese conflicto que nada bueno podría traerles.
Se vivió mucha tensión en la zona de vestuarios. Busquets y Araujo, indignados con lo ocurrido. pic.twitter.com/6HQvY61FR0
— Toni Juanmartí (@tjuanmarti) May 14, 2023
Xavi dio la voz de alarma
Todo comenzó cuando los jugadores estaban en el centro del campo festejando su título de Liga. Ganarla en este estadio adquiría un matiz diferente al tratarse del campo rival, era un derbi que había acabado en goleada.
Xavi Hernández conocedor de todo ello por su etapa como jugador y ahora entrenador les pidió desde la banda a los futbolistas que abandonaran el campo y que siguieran celebrando en el vestuario, pero los jugadores con toda la euforia no se dieron cuenta de estas indicaciones hasta que se produjo el asalto al campo.
Además, también lanzaron objetos desde la gradas y fue entonces cuando los Mossos d'Esquadra y a la seguridad privada del estadio escoltaron a los futbolistas hacia el túnel de vestuarios donde luego se produjo este desencuentro de Araujo y Busquets con algunos ultras.