Una final contra viento y marea
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El Levante UD no pudo completar la sesión de entrenamiento a dos días de la final liguera frente al Athletic Club que se jugará el domingo 1 de febrero a partir de las 12:00 horas en el Ciutat de València. Los futbolistas realizarron carrera contínua sobre el terreno de juego y, después de una charla con los capitanes, Lucas Alcaraz decidió dar por terminada la sesión cuando tan sólo llevaba discurriendo 20 minutos.
El cuerpo técnico cambió a última hora el escenario del penúltimo entrenamiento de la semana y así lo comunicó a las 9:00 horas ya que, si en la capital el viento ya es muy importante, en la Ciudad Deportiva de Buñol es más intenso todavía. Los jugadores 'completaron' un trabajo en el que algunos corrían sobre el césped mientras otros se marchaban al gimnasio y viceversa. Cuando llevaban 15 minutos sobre el verde, Lucas Alcaraz reunió en torno a sí a Juanfran, David Navarro y Pedro López y, poco después, el entrenamiento concluyó.
En otro punto del campo, en la boca del túnel de vestuarios, el delegado del equipo Andrés Garcerá y el director general Javier Vich observaban unos focos que se agitaban bruscamente e incluso en algún momento dio sensación de que podían desprenderse. Algunas pancartas enganchadas en los fondos también se desprendían de sus asiduras. Todos estos condicionantes convirtieron el entrenamiento de este 30 de enero en uno de los más atípicos de la presente temporada. A dos días de la final frente a los 'leones', los de Lucas Alcaraz también tuvieron que luchar contra el viento.
