Hasta el próximo 2 de septiembre, momento en que cierra el mercado de fichajes en LaLiga, todo puede pasar para Oier Olazábal. El meta del Levante, que pidió salir este verano en busca de minutos, continúa bajo las órdenes de Paco López.
A día de hoy su futuro es todavía una incógnita y aunque el técnico le echó un capote en la primera rueda de prensa al decir que tenía "la cabeza en el Levante", no cerró la puerta a una posible salida de aquí al cierre del mercado.
Todo dependerá de la voluntad del propio cancerbero, la cual podría estar condicionada a la decisión del míster durante los primeros partidos de Liga. Todo apunta a que la apuesta de Paco López continuará siendo Aitor Fernández.
De lo que ocurra el próximo domingo en Mendizorroza dependerá una posible decisión de Oier, quien no ha vivido un verano nada fácil después de perder la titularidad en la segunda parte de la pasada campaña.
Tras una primera mitad de campaña a un gran nivel, en el que Oier se proclamó como uno de los porteros con mejor porcentaje de intervenciones, desapareció de las alineaciones tras la decisión del cuerpo técnico. La goleada a manos del Sevilla en el Sánchez-Pizjuán fue una losa demasiado pesada para el portero de Irún.
Después de quedar relegado a un segundo plano, a Oier se le plantea una situación complicada. Tiene contrato con el Levante hasta junio de 2021 y a sus 29 años de edad debe tomar una decisión importante sobre su futuro. Si buscar una salida a otro club o por contra, intentar recuperar el puesto que perdió esta pasada temporada, situación que el propio Aitor Fernández se encargó de hacer olvidar con su nivel.
La temporada iniciará con igualdad de condiciones para todos los porteros de la plantilla, sin embargo, parece complicado que Paco López vaya a relegar a Aitor Fernández después de su final de temporada. Cabe recordar que el de Arrasate fue una petición expresa del propio técnico levantinista a quien ya conoció de temporadas atrás cuando ambos coincidieron en el filial del Villarreal.