Los jugadores que unen al Levante y al Sevilla

A lo largo de la historia del fútbol han sido varios los jugadores que han portado las camisetas del Levante y del Sevilla. Dos clubes de gran tradición futbolística en los que un total de nueve jugadores han tenido el honor de defender con orgullo ambas camisetas.

Los casos más recientes son los de Coke Andújar, José Campaña y Antonio Luna. Coke llegó al Levante en el mercado de invierno de 2017 dejando atrás a un Sevilla con el que se había alzado como campeón de la Europa League durante tres temporadas seguidas (2014, 2015 y 2016). Ahora en el Levante se ha ganado la confianza de su entrenador y es alguien esencial para el equipo. Campaña, por su parte, llegó un año antes y también se ha ganado la confianza de Paco López, tanto es así que el jugador ya ha disputado un total de 79 partidos con la camiseta levantinista, superando así los 20 partidos jugados con el Sevilla.

Tanto Coke como Campaña disputarán la próxima jornada un partido especial para ellos, pues se enfrentarán al club que, durante un tiempo, les dio cobijo, y del cual guardan buenos recuerdos.

Por otro lado, Antonio Luna se marchó del Sevilla en 2013 habiendo jugado 21 partidos y llevándose consigo la Copa del Rey de 2010, pero hasta 2017, tras pasar por varios clubes, su llegada al Levante no se hizo efectiva. En su nuevo club el jugador ya ha disputado más partidos que en Sevilla (39 partidos), pero no ha encontrado su mejor nivel y no ha podido conseguir la bendición del entrenador ni de la afición, por ello este año el jugador salió cedido al Rayo Vallecano.

Un caso muy sonado fue el de Vicente Iborra, el de Moncada dejó un club en el que era muy querido para poder triunfar. Iborra tuvo que dejar el Levante, donde la afición tenía plena confianza en el jugador, para marcharse a otro club con unas aspiraciones más acordes con las del jugador. Iborra decidió marcharse al Sevilla dejando así la que será para siempre su casa. En el equipo del Nervión el jugador, al igual que Coke, conquistó la Europa League en tres ocasiones consecutivas. No obstante, tras una breve estancia en Leicester, Iborra decidió este año regresar a Valencia, aunque no lo hizo al club de sus amores, sino que se marchó al Villareal.

Al contrario que Iborra, Salva Ballester vivió su peor momento en Sevilla, pues durante su estancia allí los del Nervión descendieron a Segunda División (1996-1997), lo que obligó al maño a marcharse al Racing de Santander, donde permaneció dos temporadas. Su llegada a Levante se hizo oficial en la temporada 2007 cuando su elevada ficha obligó al Málaga a cederlo. Como granota Ballester ayudó al club a lograr la permanencia en Primera División con su buen juego y sus cinco tantos anotados en 14 partidos. Además, el delantero siempre será recordado entre la afición levantinista por romper el hechizo del Bernabeu al marcar allí un gol que le dio la victoria ante el Madrid por primera vez en la capital.

También pasaron por ambos clubes clubes David Castedo que jugó 195 partidos en Sevilla, donde consiguió sus logros más destacados (campeonato de Segunda División y el ascenso en el año 2001, dos Europa Leagues y una Supercopa de Europa), y 19 partidos en el Levante donde terminó retirándose. Arouna Koné que, costando 12 millones de euros, fue el fichaje más caro en la historia del club hispalense, donde el jugador se vio lastrado por las lesiones, y finalmente fue cedido al Levante, donde se convirtió en el jugador más importante, siendo el máximo goleador del equipo. Baba Diawara que jugó 30 partidos en el Sevilla y 20 en el Levante. Y por último, el malagueño, Carlos Aranda, que disputó 16 partidos con el Sevilla y 10 partidos con los del Turia.