Getafe 
Levante Ünal y otra vez: el Levante es una calamidad
El sentimiento de frustración de los levantinistas que se desplazaron (y los que se quedaron en casa) al Coliseum Alfonso Pérez con un halo de esperanza de poder ayudar al Levante UD a sacar algo positivo en su visita en LaLiga Santander a Getafe fue directamente proporcional al error garrafal de Carlos Clerc en el primer minuto de juego que permitió a Ünal cabecear y hacer añicos los sueños granotas poniendo el 1-0 en el marcador.
A partir de ahí, todo lo que sucedió en el duelo quedaba desprovisto de alma, como el Levante. Pocos confiaban en una posible reacción granota por mucho que lo intentase De Frutos con una buena acción en el 13'. Davi Soria tapó bien su palo y se quitó el cuero de encima.
El Getafe olía la sangre y buscaba hacer el segundo por mediación de Sandro Ramírez. El delantero canario lo intentó a través de una falta y posteriormente con un disparo lejano y cruzado.
La noche iba camino de convertirse en una debacle y ese plan cogía más forma con otra maravilla ofensiva de Enes Ünal en el minuto 28'. Olivera alcanzó la frontal del área y puso el balón paralelo buscando la referencia del ariete otomano, quien se perfiló, espero y giró magistralmente para zafarse de Postigo. A la media vuelta, Ünal zapateó a la base del poste derecho de Aitor Fernández para firmar el 2-0.
El Levante era una lágrima y de eso se aprovechó el Getafe para llegar con peligro en varias ocasiones y sacar los colores a la zaga granota. Damián y Djené probaron fortuna desde larga distancia.
En el tramo final de la primera mitad, el Levante reaccionó y ofreció algo más de mordiente en el partido. Así llegó la jugada por banda zurda de Bardhi, que De Frutos remató al palo de la portería defendida por David Soria.
En un ambiente de clara depresión granota, el partido llegó al descanso.
La reanudación arrancó con la entrada de Martín Cáceres, el último en llegar. El cuerpo técnico decidió dar entrada al uruguayo por Duarte, que había visto una amarilla anteriormente.
La segunda mitad se desarrolló por derroteros similares que la primera. Con un Levante inoperante en ataque y con el Getafe aprovechando la endeblez defensiva de los granotas para generar acciones peligrosas. En el 51', una veloz carrera de Olivera por el costado zurdo acabó golpeando el poste de la portería de Aitor.
Tras esta acción, varios cambios en el Levante. Son y Melero sustituyeron a Pubill y Pepelu.
La impotencia y la desesperación se hacían con un apagado Levante que demostraba muy pocas armas para cambiar el signo del partido. En el 72', Melero remató un córner que obligó a Soria a emplearse a fondo y desviar el cuero otra vez al córner.
El Levante experimentó cierto arreón que le animó y le hizo estar algo más vivo en el encuentro tras la salida de Dani Gómez al encuentro.
El encuentro entraba en una fase de ida y vuelta sin demasiado sentido táctico. Borja Mayoral vio cómo su gol fue anulado por fuera de juego al tiempo que Martín Cáceres llega fuera de ritmo a tener de las varias carreras que perdió con varios rivales.
El triste final del partido volvió a proyectar el triste epílogo al que se dirige irremediablemente el cuadro levantinista. No sin antes de firmar el tercer tanto para el equipo local. El autor fue Carles Aleñà, que aprovechó una asistencia de Borja Mayoral. El catalán golpeó dentro del área ante la pasividad defensiva granota. (3-0)
