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Óscar Trejo se lleva la roja directa más rápida de la temporada: patada voladora directa a la cabeza del rival
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En menos de cuatro minutos se quedó el Rayo con diez
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El árbitro pitó amarilla pero el VAR le corrigió
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Ayoze y la expulsión de Moncayola: "Es mala suerte, pero eso no quita que sea roja"
El duelo entre el Rayo Vallecano y el Granada en el duelo correspondiente a la jornada 36 de LALIGA EA SPORTS dejó una de las expulsiones más claras de la temporada tras una acción que protagonizaron el centrocampista Óscar Trejo y el defensor Miguel Rubio. Después de haber visto esta campaña entradas muy duras como la de Nacho a Portu en Montilivi o la de Comesaña a Swedberg hace tan solo una semana, llegó este miércoles una expulsión que se convirtió en la más rápido de la 2023/24.
Una acción que arrancó en apenas tres minutos de juego en el que se vio a Trejo levantar tanto la pierna en un centro que terminó impactando de lleno en la cabeza del rival. El árbitro Díaz de Mero en principio solo consideró la falta de tarjeta amarilla pero, después de ver a Miguel Rubio retorciéndose en el césped con muestras de sangre, el VAR le terminó por llamar para ver la jugada en el monitor.
Tras unos segundos valorando las tomas, el colegiado no dudó en rectificar el castigo de la amarilla para sacarle la roja directa y dejar al Rayo con un jugador menos cuando apenas arrancaba el partido. Aunque los jugadores del Rayo protestaron tímidamente la jugada, Óscar Trejo no mostró signos de querer protestar la decisión y se marchó resignado por el túnel de vestuarios mientras el Estadio de Vallecas no le pitó por haberle dejado al equipo con uno menos en plena pelea por la permanencia.
¡Qué varapalo! 🟥 Roja a Trejo
El Rayo se queda con 10 en el minuto 4 después de que Díaz de Mera fuese al VAR a revisar la acción#LALIGAenDAZN pic.twitter.com/0nSLeGPuMO
— DAZN España (@DAZN_ES) May 15, 2024
El defensor tuvo que recibir asistencia médica y salir del terreno de juego pero siguió jugando para evitar que el Granada tuviese que hace run cambio tan pronto que perjudicase en un partido que, nada más arrancar, ya tenía la imagen.
