No es fácil la situación que vive el Málaga actualmente. En el último mes ha visto como dos derrotas ante los dos primeros clasificados le han alejado de los puestos de ascenso directo, acumulando una racha discreta de resultados que no invita al optimismo. Pero Muñiz y los suyos intentan ser positivos, el objetivo de subir sigue vigente, con más dificultades, pero sigue ahí, y el equipo debe encontrar motivos a los que agarrarse para seguir creyendo.
Restan nueve jornadas. Esto quiere decir que hay aún 27 puntos en juego y el Málaga puede contar con que tres de ellos ya los tiene en el zurrón, pues sumará los correspondientes al duelo de la fecha 39 ante el Reus (el resto de equipos tendrán que competir esa jornada). Entre los inmersos en la pelea por el ascenso sólo al Osasuna y al Málaga les queda por sumar la victoria ante el conjunto catalán tras su retirada de la competición. Necesita al menos tres tropiezos de los equipos en ascenso directo para soñar con estar entre los dos primeros. Tarea complicada, pero ya se sabe que la Segunda es traicionera y puede esconder sorpresas.
Con más dificultad o con menos, el Málaga no se ha bajado de los puestos de honor en toda la temporada. Durante las 33 jornadas disputadas hasta el momento el club blanquiazul ha permanecido entre los seis primeros clasificados, nunca se ha salido de las plazas que dan acceso al play off de ascenso. Es el único equipo de LaLiga 1|2|3 que ha conseguido tener esta regularidad durante toda la temporada, algo a tener en cuenta pese a que la racha actual de resultados no sea positiva.
De las nueve jornadas que quedan por jugarse, cinco de ellas se llevarán a cabo en La Rosaleda. Y con la suspensión del choque ante el Reus, el Málaga va a disputar tres de sus últimos cuatro encuentros de la temporada regular como local. La fuerza de Martiricos debe ser decisiva para que el conjunto blanquiazul saque lo mejor de sí. Un pleno de puntos en casa sería un gran empuje.
El principal baluarte al que aferrarse para sostener las ilusiones es la afición. El malaguismo está cumpliendo con nota. Desde el partido en La Rosaleda ante el Dépor, donde realizó un gran recibimiento al autobús del equipo, ha demostrado músculo en cada encuentro, con desplazamientos masivos recientes a Córdoba y Granada para alentar a los suyos. Su empuje fue vital para que el Málaga sacase fuerzas para rescatar un punto ante el Sporting y no piensa bajar los brazos mientras haya posibilidades.
Ya lo dijo Alfred N’Diaye la pasada semana, el Málaga tiene una gran plantilla. Es posible que muchos jugadores no hayan dado el nivel esperado durante la temporada, pero hay futbolistas como el propio senegalés, Ontiveros, Dani Pacheco, Iván Alejo o Blanco, entre otros, que pueden y deben marcar diferencias. En cualquier momento puede aparecer la calidad individual de ese tipo de jugadores para resolver un encuentro, y es el momento de que ocurra se atraviesa el tramo más importante del curso.
Si le llamamos nivel a tener una cartulina y a los tres minutos te saqien la segunda y dejas al equipo tirado.Pues si,es un nivelazo.