La situación del Málaga a un mes del inicio de Liga

Falta justamente un mes para que el balón vuelva a rodar en LaLiga 1|2|3. El Málaga CF, que se marcha este miércoles dos semanas de estadía estival a Estepona, ya sabe que abrirá la jornada inaugural ante el Racing de Santander el sábado 17 de agosto. Hay algo más de cuatro semanas por delante en las que se prevén numerosos cambios en la plantilla. Sin embargo, la planificación se encuentra actualmente bloqueada por el impasse del presidente Abdullah Al-Thani para dar luz verde a varias operaciones que los ejecutivos blanquiazules tienen ultimadas. Hablamos de traspasos, cesiones, rescisiones y también de algún fichaje.

La continuidad del Málaga en LaLiga 1|2|3 limita el área de acción económica de la entidad, que tendrá que dar salida a futbolistas con fichas prohibitivas en el nuevo escenario para poder de este modo reforzar y confeccionar una plantilla competitiva. Ajustarse a los parámetros del Salario Liga, que sufrirá una importante reducción, es clave para la viabilidad de la entidad a efectos de LaLiga, así que hasta que no se produzcan movimientos importantes en este capítulo el Málaga está maniatado, en un 'proceso de reflexión' hasta que Al-Thani agilice la planificación con sus firmas. El presidente del club blanquiazul quiere supervisar y autorizar todos los movimientos. Es quien marca el tempo con su acción o inacción.

Así, los casos más prioritarios a día de hoy por su avanzado estado de gestación son las salidas de Ontiveros al Villarreal y de Jony al Lazio. Con el primero hay ultimado un acuerdo para su traspaso por una cantidad que ronda los siete millones de euros más variables. Al-Thani exige además unas condiciones relativas a la plusvalía de un futuro traspaso y la entidad castellonense entiende que el acuerdo existente se ajusta a los valores de mercado. La cuerda está tensada, al igual que con Jony, cuya salida al Lazio también se encuentra a falta de firma. Se marcharía libre en su último año de contrato en base a su consabida cláusula liberatoria, aunque también existen opciones de que se desvincule totalmente. En el seno del club italiano ha empezado a cundir el nerviosismo por la demora, aunque el jugador ya se entrena y aparece en imágenes que el club difunde en sus redes sociales.

Además de estos dos jugadores, hay alguna salida avanzada, como la de Tighadouini, y dos casos de jugadores del filial con fichas altas y con acuerdos para salir del club: Álex Robles, que se iría al Sevilla, y Samu Casado. Igualmente, Rafa Gil sigue en sus funciones en La Academia al tener un año de contrato y pese a estar desacreditado públicamente por Al-Thani, que ha negociado sin éxito con algún candidato para suplirle. En un escalón por debajo en cuanto a avance están los casos de varios jugadores por los que existe interés firme de otros clubes. Rosales (Leganés) o N’Diaye (Getafe) son un par de ejemplos.

Fichajes

Esta situación de parálisis afecta al capítulo de incorporaciones por el punto de vista deportivo y económico. Se trata de una compleja ingeniería para cuadrar todas las piezas y números. Así, la dirección deportiva se sigue moviendo para buscar fichajes. Hay varios avanzados, el que más, el jugador del Mallorca Stoichkov, con el que hay acuerdo a falta de que lo autorice Al-Thani y se consume, además de otras conversaciones y ofrecimientos que podrían prosperar en próximas fechas. Y todo ello justo a un mes de que empiece la liga y a mes y medio de que cierre el plazo de fichajes veraniego.