El buen 'Papelito' del Málaga en El Sardinero
Al Málaga se le suele dar bien El Sardinero, donde ha conseguido cinco victorias, dos empates y cuatro derrotas. Las tres últimas visitas se han saldado con triunfo malaguista, las dos más recientes con una coincidencia goleadora. Los tres puntos viajaban en ambas ocasiones hacia la Costa del Sol gracias a un tanto anotado por Seba Fernández, conocido como el 'Papelito'.
El delantero uruguayo llegó a Málaga en el verano de 2010. Desde un primer momento se ganó a los aficionados porque cumplía los dos requisitos que exigen el himno malaguista, coraje y corazón. Pese a su escasa altura, se fajaba como un guerrero y no escatimaba ni un gramo de energía cada vez que saltaba al campo. En las dos temporadas completas que jugó con la elástica malaguista anotó un total de 12 dianas, dándose la curiosidad de que fue capaz de repetir en el estadio de El Sardinero, siendo ambos goles importantes para que el Málaga sumase dos victorias en aquellas ocasiones.
En la temporada 2010/2011, el cuadro dirigido por Manuel Pellegrini se adelantaba en la primera mitad del choque gracias a dos goles de Baptista y uno de Seba Fernández. Acortaría distancias el racinguista Rosenberg a poco más de un cuarto de hora para el final. Tuvieron que sufrir los malaguistas, pero finalmente se alzaron con el triunfo, que daba media permanencia a un Málaga que había padecido mucho aquella campaña.
En la siguiente temporada, mismo estadio, mismos rivales y mismo protagonista. De nuevo se adelantaba el Málaga por partida doble, con tantos de Isco y del central Álvaro en propia puerta. Otra vez recortaba distancias el Racing con un gol de Arana. Pero en esta ocasión hubo una diferencia, el sufrimiento final se lo ahorraron los malaguistas gracias al acierto de Seba Fernández cerca del minuto 90. Otra alegría en El Sardinero gracias al uruguayo, máximo culpable del buen ‘papelito’ del Málaga en sus dos últimas visitas ligueras al feudo cántabro, donde se disputa este sábado el Racing-Málaga (18:00 horas, #Vamos).