De Sebastián a Martín: el legado de Viberti en La Rosaleda
En las oficinas de La Rosaleda se trabaja a destajo para encontrar soluciones a la diezmada plantilla actual. Los problemas económicos se traducen en trabas a la hora de firmar jugadores, y de eso sabe mucho Martín Viberti, hijo del mito del que se cumplen 50 años de su llegada a Málaga. Martín es uno de los miembros de 'La Cueva', el hábitat de trabajo de una secretaría técnica que ahora lidera Manolo Gaspar pero a la que Martín llegó avalado por Mario Husillos, actualmente en el West Ham.
"Me trajo Mario y para mí es un sueño hecho realidad. Trabajar en el Málaga es un orgullo, lamentablemente hoy por hoy no pasamos por un buen momento pero me quedaría en este club toda la vida. Es un sentimiento, la verdad que cuando me llamaron para trabajar ni lo dudé. Dejé mi trabajo en Argentina, vendí mi coche y me vine", recuerda Martín, un enamorado de la ciudad y de los malagueños: "Tengo amigos desde niño, nada me resulta ajeno ni raro. Estoy muy a gusto trabajando en el club y viviendo en una de las mejores ciudades del mundo".
Por desgracia, ahora toca pensar en otros mercados, mucho menos ilusionantes que a los que se miraba en épocas más boyantes: "Es lo que siempre dice nuestro director deportivo, Manolo Gaspar: hay que hacer una lectura de la realidad. Hoy nosotros no estamos para fijarnos en ningún jugador de Argentina, Uruguay o Brasil por una cuestión obvia, la económica. Estamos trabajando mucho el mercado de Segunda B, pero uno se adapta. Gusta ver fútbol y jugadores y para eso estamos".
El buen rollo con Manolo Gaspar y Capote
En 'La Cueva' el ambiente es fantástico. "Nos llevamos muy bien y eso implica ser sincero y decirse las cosas con educación y con respeto a la cara", señala Martín, que recuerda que es "la línea que marcó Manolo", cuyo trabajo infatigable se ha multiplicado desde que se hizo cargo de la dirección deportiva: "Ahora que se le ha dado la oportunidad creo que la está aprovechando. Estamos trabajando a full. Quizá el momento es muy complicado, algo difícil de manejar, pero tenemos la confianza y la fe de que lo vamos a sacar adelante".