José González vuelve a los banquillos. El gaditano, de 53 años, se ha comprometido con el Wuhan Zall FC y se embarca en la aventura china, camino ya explorado por otros entrenadores españoles. En el país asiático terminó como futbolista. Su último equipo fue el Málaga CF, en el que también estuvo como jugador, en la temporada 2017/2018. Cogió el testigo de Míchel en un curso en el que el equipo malaguista terminó descendiendo a LaLiga Smartbank, donde aún permanece. A su situación se ha referido el técnico en algunas ocasiones desde entonces. "Es una situación dramática", llegó a decir.
La carrera profesional de José González se divide entre España y China. Como futbolista, se formó en las categorías inferiores del Cádiz, con cuyo primer equipo debutó en 1986 y el cual abandonó cinco años más tarde para fichar por el Mallorca. De ahí pasó al Albacete, Rayo Vallecano y Málaga, para poner rumbo al continente asiático de la mano del Tianjin Lifei, donde colgó las botas en 1997.
Volvió a Cádiz, donde empezó su carrera en los banquillos cuatro años más tarde. Comenzó en el juvenil, pero rápidamente dio el salto al primer equipo, con el que logró el ansiado ascenso a la categoría de plata tras nueve años en Segunda B. Esa fue la primera de las tres etapas que pasó al frente del conjunto cadista en la categoría de plata, donde también ha entrenado al Albacete, Córdoba, Real Murcia y Málaga (su última aventura como entrenador).
Entre tanto, José González regresó a China para enrolarse en el cuerpo técnico de Gregorio Manzano durante la etapa de este en el Beijing Guoan. Ejerció como tal durante dos temporadas, pero volvió a España para salvar la categoría con un Granada que tenía pie y medio en Segunda a falta de 13 jornadas para el final. Fue entonces cuando se convirtió en el primer entrenador del cuadro chino, aunque apenas una semana después de su llegada, el club cambió de dueño y salió.
Todos los que ya no tienen nada que hacer en España como futbolista o entrenador se van a China para seguir engordando la cartera, algunos, y para poder seguir sobreviviendo, otros. Entre los entrenadores que se tienen que ir a la tierra de Mao-Tse Tung, se encuentra Jose González un técnico de poca monta que para buscarse las habichuelas tiene que irse al país asiático porque en nuestro país no se come ni una rosca. Y menos después del papel que hizo con el Malaga.