Mañana de novedades en el entrenamiento del Málaga CF. Podría resumirse bien con un alta y una baja. Sergio Pellicer tiene buenas noticias y es que Keidi Bare, que se perdió los duelos frente a la Ponferradina y el Fuenlabrada por unas molestias musculares, se reincorporó de manera progresiva con sus compañeros. El albanés trabajó a buen ritmo y apura sus opciones de cara a estar disponible el domingo en La Rosaleda ante el Mirandés. Se une al alta de Adrián, que ya sí está a pleno ritmo del grupo. También se vivió en el Ciudad de Málaga el adiós de Lorenzo González, que aprovechó la ocasión para despedirse de sus compañeros.
El hispano-suizo sí se ejercitó ayer en el gimnasio ya que aún se recupera de un pinchazo en la cara posterior de su pierna derecha, con el que lleva un mes en el dique seco. Ahora el delantero, que llegó en verano a Martiricos, afronta una nueva etapa en su incipiente carrera. Se marcha al St. Gallen suizo, donde espera contar con los minutos que le han faltado en la Costa del Sol. Es el equipo que más fuerte ha pujado por el joven. En principio, se trata de una operación a coste cero para el club helvético, idéntica fórmula con la que llegó al equipo malagueño, y deja una ficha profesional libre que da cierto margen de maniobra para este cierre de mercado invernal.
Keidi Bare se reincorpora de manera progresiva al grupo 😊👏
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— Málaga CF (@MalagaCF) January 23, 2020
Hubo una amplia sesión de vídeo antes de saltar al césped para la plantilla, que luego se ejercitó en una sesión matinal marcada por el frío y la lluvia, denominadores comunes en los últimos días. Pacheco, Buenacasa y David Lombán se quedaron en el gimnasio para seguir con sus respectivas recuperaciones y volvió a guardar reposo Mikel Villanueva, que padece un constipado según fuentes del equipo malagueño.