Aarón y Quintana: la ilusión no entiende de edades
Aarón Ñíguez y Alberto Quintana son polos opuestos en varios sentidos. Uno es un veterano ya del fútbol, alguien que ha probado alegrías y sinsabores a lo largo de una carrera que ahora quiere volver a enaltecer en Málaga. El segundo, la gran sorpresa de Pellicer en la lista para el retorno a los entrenamientos, quiere alzar el vuelo al primer nivel después de ser fundamental en los planes del filial. Los dos tienen un reto por delante: convencer a su entrenador. El atacante, que se quedó con la miel en los labios y aún no ha debutado por culpa de la crisis del coronavirus, apunta a ser esencial en las 11 finales que restan. Al segundo todo lo positivo que le venga ya será un premio para su zurrón particular.
"Como un niño pequeño, vuelves a los buenos momentos que te da el fútbol. A partir de ahí, el segundo día empiezan a pesar las piernas, la carga de trabajo se empieza a notar. A pillar la preparación lo antes posible. Las ganas de retomar la normalidad son muy grandes", confesaba Aarón este domingo (ver vídeo inferior), en el que compartió La Rosaleda, entre otros, con el joven Quintana. Al canterano, gracias a las imágenes ofrecidas por LaLiga (ver vídeo superior), se le pudo ver muy metido en cada movimiento sobre el verde de Martiricos. Tiene un sueño entre las manos.
Aarón habla de que esta situación es "como una pretemporada" que ha tocado hacer en mayo y que espera que se cumplimente "sin lesiones" para encarar la vuelta a la competición. El ilicitano habló también sobre un aspecto destacado en los entrenamientos. Y es que Sergio Pellicer y su cuerpo técnico han permitido que la música resuene en la megafonía del estadio: "Esto es un detalle más. Nosotros estamos acostumbrados a estar en el gimnasio con música y que la pongan en la megafonía nos motiva para seguir entrenando más fuerte, con mas alegría".
Segundo día de trabajo
Así transcurrió otra mañana en La Rosaleda, donde veteranos y noveles son tal para cual en una pretemporada inusual, con el verano asomando en vez de marchándose y con 11 partidos aún por jugarse. Los malaguistas realizaron un trabajo físico similar al de la primera jornada, completando un circuito de actividades con diferentes ejercicios de carrera con y sin balón, y de trabajo específico de fuerza sobre el césped. Algunos futbolistas, además, completaron su entrenamiento en el gimnasio. Pellicer sabe que todos pueden ser importantes, más todavía si se confirma la nueva normativa que permitiría hacer cinco cambios y conformar convocatorias de 23 efectivos. Aarón y Quintana, tan diferentes y tan iguales al mismo tiempo, son la viva imagen de la ilusión.