Del orden a la guinda
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La parábola de las piedras en la mochila
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El Rayo se refuerza con Antoñín
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En directo, el mercado de fichajes del Málaga
"Hay un boceto de plantilla, un equilibrio, que es lo principal para que haya estabilidad. El orden ya está establecido". Son palabras de Sergio Pellicer, un técnico alejado de grandes titulares pero al que leer entre líneas siempre sirve para dibujar el paisaje malaguista. Este viernes, en la previa del partido ante el Rayo Vallecano, celebró la firmeza con la que el club ha trabajado en todas sus áreas durante el verano para alcanzar la recta final del mercado con los deberes prácticamente hechos. Con Luis Muñoz de nuevo en la plantilla, al Málaga CF sólo le resta ponerle la guinda a una plantilla que, pese a la sanción de LaLiga, contará con "dos jugadores por puesto". Falta coronar el boceto.
En este sentido, Pellicer habló de un jugador "sobre todo en la posición de ataque" para jugar "tanto por fuera como por dentro". Chavarría y Jairo fueron los últimos en echar madera al ataque, pero Pellicer y la dirección deportiva esperan cerrar a un inquilino más de esa vanguardia. La complicada opción que se abrió por el camino con Antoñín terminó por desvanecerse este mismo viernes cuando el Rayo anunció su llegada a modo de cesión. Casualmente, el rival blanquiazul de este sábado. La 18ª ficha se cuece con mimo en La Cueva, con el malagueño Joaquín Muñoz como una de las opciones. Jugador que interesa desde hace meses, al futbolista del Huesca le han fichado a otro malagueño, Ontiveros, como competencia y ve con buenos ojos la posibilidad de recalar en el equipo de su tierra. "Hambre e ilusión" es lo que pide Pellicer.
El mercado vivirá unas últimas horas de mucho trajín, no son pocos los equipos con excedente en sus plantillas y con la necesidad de aligerar salarios para adecuarse a las exigencias de LaLiga. Eso invita a pensar que pueden surgir opciones de mercado, como la de un Cristo González por el que el Málaga mantiene también interés. Al jugador le agrada la idea, si bien la hipotética operación -sería una cesión- tiene aristas debido a las pretensiones del Udinese. Las posturas están alejadas con un equipo que apostó por él la temporada pasada antes de cederle al Huesca. Con el poso de la tranquilidad instalado en Martiricos, Pellicer espera la guinda con la que trabajar con todas las de la ley con ese boceto que tanto demandaba.