Envuelta para regalo. Así recogió la victoria el Almería en La Rosaleda, donde se plasmaron las diferencias entre un equipo al que le hierve la sangre por ascender y otro, el Málaga, que igual se ha visto con lo deberes hechos antes de tiempo. Es el riesgo a correr cuando el peligro no te acecha y otras batallas te quedan grandes. Arriba, al menos un par de peldaños, está un Almería que fue más equipo que el Málaga (0-3). Fue una cuestión de pegada, de fútbol, de acierto, de nervio y, por momentos, de intensidad. Y a los últimos dos puntos se asomó peligrosamente el Málaga este martes en la primera parte, regalando de forma incomprensible los dos goles a su rival. Dos errores infantiles, graves, cruzando dos balones por delante de la línea defensiva permitiendo la recuperación del Almería. De querer pelear contra un gigante a verte desnudo antes de tiempo. Hay guerras que son para otros.
Gestionó Pellicer un once con cinco cambios, con Ramón y Benkhemassa como grandes nombres propios. El primero, que denotó estar lejos de un nivel óptimo, protagonizó el primer regalo de la tarde. Primero, Cristo puso en un compromiso a Luis Muñoz y, después, Ramón cruzó un balón bombeado sin apenas fuerza ni dirección. El Almería se activó, Lazó aceleró y Robertone tiró el desmarque al lado contrario. Pase entre líneas y definición perfecta. Parece fácil, realmente no lo es. El Málaga reaccionó con balón, pero sin apenas ritmo. Un par de internadas de Joaquín fueron lo más destacado ofensivamente, además de una volea de Caye que estampó en Maras antes de que la primera parte tuviera su cuota de polémica.
Tenía que pasar, y por una vez el VAR rescató al Málaga. Juande entró con todo a Sadiq a ras de suelo, rebañándole el balón en una acción límite en la que Ávalos Barrera vio penalti. No así Arcediano en el VAR, que llamó a su colega y éste, en pocos segundos, revocó su decisión. Vida extra para el Málaga. Extra y efímera, apenas le duró un minuto. Alexander repitió el mismo error de Ramón -segundo partido consecutivo en el que falla estrepitosamente en un gol- y Lazo, que estuvo toda la tarde con la flecha hacia arriba, encañonó un derechazo bestial que acabó convertido posiblemente en el gol de la jornada. Un remate que dibujó la brecha entre un equipo y otro. Un latigazo de pura realidad.
La imagen del equipo cambió tras el descanso. El Almería recogió la ropa y los blanquiazules, con Escassi y Jairo en el campo, mejoraron a todos los niveles. Adelantaron las líneas, asentaron la retaguardia y asomaron constantemente por el área de Makaridze. Estuvo muchos minutos en ese punto de que, de haber marcado, se hubiera enganchado claramente al encuentro. Porque fue mejor, sin más. A Caye le anularon un gol por fuera de juego y Lazo desmontó a un Alexander claramente venido a menos en lo que pudo ser el 0-3. El Almería se enganchó a la chepa de Sadiq como único recurso y ahí Josua, otra vez a un nivel altísimo, ganó la batalla con continuidad.
Pero volvió a faltar la llave del gol, Caye remachó un par de balones de cabeza fuera y Jairo se quedó con la miel en los labios en una jugada individual que tardó en definir. Entró Scepovic, también Jozabed, pero la gasolina se acabó y el Almería sentenció... tras otro regalo del Málaga. Sadiq tiró un desmarque y Dani Barrio salió de forma muy precipitada, permitiendo el remate sin portero a Sadiq. La salvó Alexander, pero Morlanes recogió y cedió de nuevo al nigeriano, sutil en su definición. Campana y se acabó. Para colmo, Josua se fue lesionado. Todo malas noticias en un partido para olvidar cuanto antes. Lugo, próxima parada. Y ahí no se puede fallar.
Pues nada, otra vez será. El presupuesto de este Almeria es muy superior al Málaga, añadiendo las bajas, así que no es para rasgarse las vestiduras. El próximo partido si que es ganable, aunque tampoco es una finalisima. Lo de pretender jugar los play-off de ascenso es absurdo, ya que el Málaga económicamente no está preparado para un hipotético ascenso. Ahora se ha de centrar en largar a Alibabá definitivamente. Estabilizar su economía, cosa complicada sin publico. Tendrá que ser con venta de jugadores, inversores, etc. Cuando pueda hacer un equipo para jugar en primera y mantenerse, entonces es cuando a de luchar por ascender, para que no pase como al Huesca, que asciende y luego desciende del tirón con otro montón de deudas.