El Málaga instala el pesimismo: ¿Listos para el play off?
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El Málaga es cuarto y está a once del Castellón faltando 24 puntos por disputarse
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La reivindicación de lo pasado y el conformismo ya no sirven para su afición
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El 'palo' de Antonio de la Torre al Málaga tras empatar ante el Ceuta: "Este es el nivel"
El Málaga tiene fiestitis aguda. Es alérgico a cualquier atmósfera que implique expectación máxima y celebración previa. Antes fueron aquellos recibimientos con cánticos y bengalas donde pocas veces se ganaba, ahora hasta la estética retro del 120 aniversario y una camiseta mística. Ni con esas la afición malacitana pudo certificar que el fútbol es una fiesta, porque cuando no se gana no hay nada que celebrar.
El Ceuta compitió, hizo su trabajo y rascó un punto que celebraron como triunfo, mientras que el Málaga volvió a estancarse en una reacción insuficiente que le frena en seco por lo que soñaba hace tres semanas. Tres empates consecutivos ante Algeciras, Linares y Ceuta. Una victoria en los últimos cinco partidos. El pesimismo se ha instalado con fuerza entre los aficionados por esta última racha en un momento de la temporada donde no se permiten demasiados resbalones.
Hace menos de un mes, el 17 de marzo, tras ganar al Intercity en casa, el Málaga veía a cinco puntos el ascenso directo. Ahora lo tiene a once. Faltan siete partidos y Castellón (1º), Córdoba (2º) e Ibiza (3º) ganaron sus partidos esta jornada ante Intercity (1-2), Real Madrid Castilla (0-2) y Melilla (4-3), respectivamente. Con el empate contra el Ceuta, el Málaga retrocede a la cuarta posición y sus esperanzas de evitar unos play off se han puesto muy complicadas.
¿Y ahora, qué?
Con el Castellón a tal distancia y con el golaveraje perdido contra ellos (es decir, esos once puntos son en realidad doce), el Málaga ha pasado en tres semanas de ilusionarse con la vía directa a tener que ir haciéndose el cuerpo a una liguilla de ascenso que parece inevitable.
Aunque no es ni siquiera algo seguro, pues la distancia con el Recreativo de Huelva, sexto clasificado, es de nueve puntos (diez, con golaveraje ganado), pero en siete semanas "pueden pasar muchas, muchísimas cosas", que dijo Pellicer. Una de ellas también es un descalabro como el del Ibiza, que llevaba ocho jornadas sin ganar hasta que rompió la dinámica este domingo.
El Málaga está ahora en alerta por lo que viene y con cómo afrontarlo. Sí, su segunda vuelta es buena, pero la inconsistencia en cada último partido le está lastrando. La reivindicación de lo pasado y el conformismo ya no sirven para su afición, que aumenta las críticas de manera exponencial.
Cada error pesa toneladas en este sprint final y lo que queda no será nada sencillo: Atlético 'B' fuera, Real Murcia (7º) en casa, Córdoba en el Arcángel (!), Mérida en La Rosaleda, ir a San Fernando, recibir al Antequera y acabar la temporada en casa del Real Madrid Castilla.
Tras el último 1-1, Sergio Pellicer volvió a insistir en su discurso para destensar la presión de una cuerda cada vez más tensa. "Tenemos que ser conscientes de que habríamos firmado estar así a principios de temporada. Tenemos 58 puntos. Estas siete jornadas tenemos que seguir compitiendo y ser duros y más consistentes en las victorias. Ahora, otra vez limpios y a saber el camino que tenemos. La situación es muy difícil, pero queremos acabar lo mejor posible".
Queda poco y a la vez mucho. 24 puntos es un saco. El Málaga y su gente ya apenas piensa en el primer puesto, sino en ganar todo lo posible para llegar en el mejor estado posible a las eliminatorias de ascenso donde ser terceros te aseguran el factor campo y la ventaja de no tener que llegar a unos hipotéticos penaltis. Que lo demás venga solo.
Lo bueno para la hinchada, pese a este estado de pesimismo, es una obviedad: el Málaga sigue dependiendo de sí mismo. Sigue teniendo margen para acallar las críticas. Todavía no tiene que hacer cábalas. Ascenderá si es capaz de merecerlo por sus propios medios, si tiene la capacidad de ganar partidos de manera consecutiva. Entonces, el objetivo llegará, sea por medio de eliminatorias o con el milagro del primer puesto.