La Rosaleda sigue siendo de Primera: solo hubo cuatro estadios más llenos en España

Cuando este verano hubo récord de abonados en la historia del club con 26.550, mucha gente pensó: ¿Y si La Rosaleda se está quedando pequeña? El pasado fin de semana, en el debut ante el Mirandés, no hubo lleno total. Ya sea por razones varias como la hora tardía del partido (21.30 horas), por ser fechas señaladas para estar fuera por vacaciones o en la Feria de Málaga, que vivía su último coletazo. Aun así, la cifra de asistencia fueron palabras mayores: 26.066 espectadores.

Sobrevuela casi siempre una nube de dudas sobre el conteo de los tornos de acceso al estadio, pues el ojo engaña y no parece que faltaran 4.000 asientos por ocuparse, pero así lo informan las estadísticas oficiales del club. Un dato que coloca a La Rosaleda como el quinto estadio más lleno del fútbol español en la jornada dos, contando todas las categorías.

Tan solo cuatro templos de Primera estuvieron por encima: el Santiago Bernabéu, con 70.178 personas en el Real Madrid - Valladolid; el Cívitas Metropolitano, con 60.414 aficionados en el Atleti - Girona; el Estadio Olímpico Lluís Companys, con una cifra de 46.448 personas en el Barça - Athletic Club y el Ramón Sánchez Pizjuán, con 34.004 asistentes al Sevilla - Villarreal. En las dos jornadas, La Rosaleda también ha sido el estadio con más afluencia de toda LALIGA HYPERMOTION, por delante de los 25.715 asistentes a Riazor en el debut en casa del Dépor.

El próximo sábado, el Albacete, equipo que lidera la clasificación en este arranque con dos victorias ante Granada y Elche, será el rival del Málaga de nuevo en La Rosaleda a la misma hora que la jornada anterior (21.30 horas). Es el segundo partido seguido en casa, cosas del calendario asimétrico. Veremos si se superan los 27.000 esta vez.

Con vistas al Mundial 2030

Lo que es seguro es la problemática cada vez mayor en los accesos. Los aficionados que asisten en coche tienen problemas para aparcar en una zona altamente saturada en días de partido y con muy poco margen en el transporte. No hay metro ni se plantea que lo haya, como reconoció el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre. La opción única es ir en autobús, taxi o VTC, pero los hinchas que deciden ir en coche particular tienen razones para quejarse de las largas acumulaciones que se dan en la previa y en el pospartido, con mucho tráfico y zonas de aparcamiento insuficientes.

Una situación que existe desde siempre, pero que se nota con más profundidad a la que crece paralelamente esta ola de malaguismo. Días de asistencias récord que vuelven a recordar que La Rosaleda, cara al Mundial 2030, necesita una obra faraónica no solo de puertas para adentro, sino también en sus aledaños.

Primero, para cumplir con el requisito mínimo de los 5.000 aparcamientos que exige la FIFA y, en segundo lugar, para descongestionar los accesos por carretera. Ese parking se ubicará en la zona norte, mediante una obra de una gran dificultad orográfica que obliga a prescindir tanto del campo Anexo donde entrena el Málaga como del IES Guadalmedina, instituto ubicado justo detrás del Anexo y que pertenece a la Junta. 

Desde las instituciones coinciden en que los trabajos se iniciarán el próximo año 2025, algo que no afectaría a la celebración de los partidos, pues se haría por fases, cerrando parcialmente las gradas que se estén remodelando. Este proceso de reconversión del estadio tiene un plazo de ejecución de 36 meses, por lo que la nueva Rosaleda estaría terminada para finales de 2028, con un margen de año y medio para el comienzo del Mundial 2030, cita donde será una de las sedes.