Arabia Saudí triplica el sueldo para llevarse el comodín de Ancelotti, 23 días para decir adiós al Real Madrid

El mercado de Arabia Saudí sigue buscando nuevas estrellas. Por si no tuvieran suficiente con haberse llevado ya a Cristiano Ronaldo, a Sadio Mané, a Kalidou Koulibaly, a Sergej Milinkovic-Savic, a Fabinho o a Malcom durante los últimos meses, todavía quieren más. Y el Real Madrid corre el riesgo de perder a una de sus principales figuras, tal y como sucedió con Karim Benzema, quien contra todo pronóstico optó por no renovar su contrato, y rechazar la propuesta de Florentino Pérez.

Todo el mundo se esperaba que siguiera otro curso más, hasta 2024, pero quiso probar suerte en otro continente, y no pudo rechazar la oferta del Al-Ittihad, que le multiplicaba su salario. Una historia que Carlo Ancelotti puede revivir, en este caso con David Alaba como protagonista, que también ha recibido la llamada de un conjunto de la Saudi Pro League para que abandone el Santiago Bernabéu, y se marche a vivir una jubilación bañada en oro.

No se ha revelado qué escuadra es la que tienta al ‘4’, pero sí se sabe las cifras que se manejan. Al polivalente zaguero austríaco le ofrecen unos 30 ‘kilos’ netos al año, más del triple de los nueve que se embolsa ahora, mientras que como concepto de traspaso están por la labor de poner sobre la mesa entre 40 y 45 millones de euros, como ha desvelado el portal web ‘Defensa Central’. Una propuesta difícil de rechazar para todas las partes implicadas, y que deberán de valorar con calma durante los próximos 23 días, el tiempo que queda de mercado.

Porque el Madrid puede hacer caja con un futbolista que aterrizó hace dos años de forma totalmente gratuita, y que ocupa una posición que está más que cubierta con Nacho Fernández, Antonio Rüdiger y Eder Militao. Por parte del ex del Bayern de Múnich o del Hoffenheim, ya ha ganado absolutamente todos los títulos posibles desde que llegó a España, y económicamente no se pueden comparar las cifras que le proponen.

Puede convertirse en una salida sorpresa, como la de Casemiro el año pasado.