El Chelsea mueve 60 millones al Barça, el número 1 de Xavi Hernández, entre la espada y la pared sin Dembélé ni Kessié

El Chelsea suma y sigue, y no se conforma con lo que ya tiene. A la plantilla se han incorporado Axel Disasi, Malo Gusto, Christopher Nkunku o Robert Sánchez, y trabajan en traer más caras nuevas para contentar a Mauricio Pochettino. Moisés Caicedo, del Brighton & Hove Albion, ahora mismo es la prioridad de Todd Boehly, así como Dusan Vlahovic, por el que tienen negociaciones abiertas con la Juventus de Turín. Pero todavía quieren más.

Y una de las zonas a mejorar es claramente la retaguardia, en la que el técnico argentino cree que hay más carencias. Por esa razón ha puesto su atención en una estrella del Barça, y ha solicitado a la directiva que haga una ofensiva para quitárselo a Xavi Hernández. Se trata de Jules Koundé, que en su primera campaña fue una pieza indispensable en las alineaciones, pero puede ver como su protagonismo se reduce de forma considerable.

La intención de Joan Laporta es firmar a un lateral derecho de primer nivel que solucione los problemas que arrastran, y esto perjudicaría claramente al internacional francés, que pasaría a tener menos minutos. Porque debería de competir por un puesto, ya que en el eje de la zaga tampoco tiene su hueco asegurado, por culpa de la presencia de Ronald Araújo, de Íñigo Martínez, de Andreas Christensen o de Eric García, que finalmente todo indica que seguirá.

Por lo tanto, en Stamford Bridge confían en poder tentar al ex del Sevilla y del Girondins de Burdeos para que diga adiós al Camp Nou, y se marche a la Premier League. Le ofrecerán un salario muy suculento, y están por la labor de pagar cerca de 60 millones de euros, que esperan que sean suficientes para que le abran las puertas, explica ‘El Nacional’. Eso sí, será un contratiempo importante el hecho de que no puedan disputar competiciones europeas el año que viene.

Aún y así, Pochettino tratará de seducir a Koundé, que próximamente se despedirá de dos de sus mejores amigos en el vestuario del Barça, Ousmane Dembélé y Franck Kessié.