Pelayo Fernández, a tiro del Sporting tras no ascender el Barça Atlètic
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Pelayo Fernández, un fichaje que se pone a tiro para el Sporting
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Es el hijo de Sergio Fernández
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Finalizada ya la temporada 2023/2024 con la disputa este fin de semana de los play off de ascenso que restaban por jugarse, el Real Sporting ya solo piensa en la planificación deportiva de la próxima temporada. La confirmación de que Rubén Albés es el nuevo técnico rojiblanco es la primera piedra de un proyecto con aires de renovación tras la marcha de varios jugadores importantes en las últimas campañas.
El primero de ellos, un Pablo Insua que en sus dos temporadas en Gijón se ha erigido como el estandarte de la defensa, tanto para Abelardo como para Miguel Ángel Ramírez. Por eso mismo, uno de los fichajes prioritarios para este verano es el de un central que haga olvidar al gallego.
Tal y como informa La Nueva España, uno de los jugadores a los que Gerardo García sigue de cerca es el avilesino Pelayo Fernández, titular indiscutible en el filial del FC Barcelona que este pasado domingo se quedó a las puertas del ascenso a LALIGA HYPERMOTION tras perder en El Arcángel frente al Córdoba.
Tras no ascender su contrato con el FC Barcelona concluye el próximo 30 de junio y no parece que haya intenciones de renovarle, por lo que acabaría llegando a Gijón en calidad de jugador libre.
Carácter Sporting para el centro de la zaga
Aunque el jugador pueda tener ofertas de otros equipos de LALIGA HYPERMOTION, el factor emocional puede acabar siendo fundamental en la decisión que acabe tomando. Y ahí el Sporting tiene todas las de ganar.
Porque Pelayo Fernández es hijo de Sergio Fernández, canterano del club y protagonista de uno de los traspasos más caros de su historia -3,6 millones de euros abonó el Celta por hacerse con sus servicios en 1998-.
De hecho, guardan bastantes similitudes, más allá de las físicas. Ambos juegan de centrales y tienen elegancia en la salida de balón, hasta el punto de que Rafa Márquez le ha situado como pivote en más de una ocasión.
Como su padre, también se formó en Mareo, aunque en 2019 firmó por el FC Barcelona procedente del CD Quirinal. Allí ha ido quemando etapas en las categorías inferiores hasta ser un fijo en el filial y llegar a participar en varios entrenamientos a las órdenes de Xavi Hernández.
Desgraciadamente también ha heredado de su padre la propensión a lesionarse. De hecho, esta ha sido una de las razones por las que, a diferencia de muchos de sus compañeros de generación, no ha tenido la oportunidad de debutar con el primer equipo.