Un molde señala en una urbanización dónde marcó Corea del Norte gol a Italia
El gol de Pak Doo-ik que le dio a Corea del Norte la victoria sobre Italia, en el Mundial de 1966, ha quedado inmortalizado en la urbanización que ocupa el lugar donde estaba el estadio Ayresome Park de Middlesbrough, donde se jugó el partido.
El Ayresome fue demolido en 1995, cuando el "Boro" se trasladó al Riverside, y su espacio fue ocupado por bloques de viviendas. Para mantener el recuerdo del histórico recinto, el artista Neville Gabie propuso en 2000 una serie de "pequeñas intervenciones en bronce" en la urbanización, bajo el título "La sala de Trofeos", que iban desde un balón donde estaba situado uno de los puntos de penalti, a unas botas junto a una puerta de una casa, donde se ubicaban los vestuarios, y por supuesto, un recuerdo al gol más histórico.
Un molde en bronce con la pisada de una bota de fútbol señala el punto desde que el delantero norcoreano mandó su disparo cruzado a las 20:10 horas del 19 de julio para clasificar a su selección a los cuartos de final de un Mundial, por primera y única vez, y a Italia de vuelta a casa, donde los jugadores fueron recibidos a tomatazos por su enojada afición.