Paiporta y la lucha para volver a la normalidad cinco meses después: "Ves esto y dices aquí el fútbol se ha acabado"
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Su estadio sigue sin ser recuperado
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Han logrado quedar campeones en su grupo
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El Paiporta y el Benetússer, 'olvidados' tras la DANA: "Hay un volumen de pérdidas de 15-18 millones"
Paiporta logra sonreír poco a poco, pese a que todavía queda mucho trabajo por hacer. Cinco meses después de ocurrir la tragedia de la DANA, todo sigue igual por el Campo de futbol "El Palleter". Vestuarios con barro, instalaciones totalmente destruidas y un terreno de juego en dónde no rueda la pelota.
El pueblo valenciano fue uno de los que más sufrió la DANA y pese a las ayudas de muchas personas, hay cosas que no se pueden arreglar. Pese a ello, ellos siguen sonriendo y luchando ante la adversidad, como nos ha explicado a ElDesmarque el presidente del equipo de fútbol, Juanjo Casañ.

Un estadio impracticable tras la DANA
Los daños de la ciudad deportiva tras el paso de la DANA son impracticables. Bajo el barro, recuerdos de muchísimos años en los que el fútbol era lo más importante. "Ves esto y dices: 'aquí el fútbol se ha acabado", comentaba el presidente a ElDesmarque.
Pese a que todo parece imposible, en el Paiporta CF no han tirado la toalla y siguen haciendo esfuerzos para volver a ver su estadio como antiguamente. "Empiezas a mirar cosas, empiezas a sacar fuerzas de dónde no las hay y comienzas a trabajar", reconocía.
"Hemos empezado a salir de esto poco a poco. Se puede tirar mucha gente del barco, pero no yo", reaccionaba Casañ, quién no ha dejado de luchar por hacer que el Paiporta CF pueda volver a su estadio más pronto que tarde.

Y aunque las cosas no vayan tan bien, en lo futbolístico están dando una muestra de esfuerzo. Son los líderes de su liga, pese a no jugar en su estadio, demostrando su valía dentro del terreno de juego. "Estas cosas son las que te van ayudando a superar todo", reconocía Casañ.
Una afición que pese a la distancia no ha dejado sólo a su pueblo. "Cuando ves la grada de un campo y estas jugada, la mirada y dices 'pero si todos llevan nuestra bufanda'... Además se recogen entre ellos, aparecen en todos los partidos... te dan fuerzas para seguir. Unen muchísimo", zanjó.
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