Rubi, sin recambios en la defensa
Rubi tendrá que reinventarse en los próximos partidos. Tras la derrota frente al Sevilla, el Espanyol recibe al Girona después del parón liguero. Un encuentro para el que el conjunto periquito llega bajo mínimos en la defensa.
La lesión de Óscar Duarte ha quebrado los planes de Rubi. Si bien es cierto que no termina de contar para el técnico, el central no jugó con Costa Rica contra Chile y regresó a Barcelona. Los médicos blanquiazules le sometieron a pruebas que determinaron que el origen de sus molestias está en la irritación de una antigua cicatriz en el tercio superior del cuádriceps izquierdo.
Además, el defensa costarricense tiene un ligero edema en la zona. Los galenos del Espanyol, tras esta primera exploración, esperarán 24 horas para observar la evolución del futbolista. Ahí se determinará si necesita más pruebas, según ha informado el club.
No obstante no está previsto que vuelva al menos hasta diciembre. Su lesión se une a la de Naldo, ausente hasta el derbi ante el FC Barcelona. Un hándicap que deja al equipo únicamente con dos centrales disponibles.
Mario Hermoso y David López son los únicos defensas disponibles que tiene el equipo. Algo que podría acarrear problemas mayores en caso de sanción o una nueva lesión. Por eso Rubi tiene previsto subir al canterano Lluis López, que entrará en la rutina de entrenamientos del primer equipo y podría ser utilizado en caso de necesidad. Otra de las alternativas que se barajan es que Dídac jugara en el centro de la zaga, como opción de última hora.