Europa exige un esfuerzo
El Espanyol recibe este domingo al Sevilla, en el RCDE Stadium, con la intención de aprovechar el terremoto producido en el club andaluz tras su eliminación de la Liga Europa ante el Slavia de Praga, que provocó la destitución del ya su exentrenador Pablo Machín, sustituido por Joaquín Caparrós.
De todas formas, el vestuario blanquiazul no se fía del supuesto mal momento sevillista. Los futbolistas del conjunto catalán han destacado la calidad de la plantilla rival para afrontar cualquier desgaste físico y anímico. Además, el Espanyol tiene sus propias prioridades: quiere ganar para mirar a la zona noble de la tabla.
Los pupilos del entrenador Joan Francesc Ferrer 'Rubi' atraviesan una etapa tranquila, en la que han recuperado parte de las sensaciones de su brillantez en el primer tercio del curso.
El Espanyol no ha perdido en los seis últimos compromisos y confía en sumar un nuevo triunfo como local, donde muestra un mejor rendimiento.
El espectador disfrutará, a priori, de un partido con numerosos alicientes. Por una parte, los catalanes llegan con ganas de resarcirse tras el 3-0 en el Sánchez Pizjuán de la primera vuelta, que supuso el inicio de una mala dinámica en la que encadenaron seis derrotas.
Además, los aficionados presenciarán el duelo entre Borja Iglesias y Ben Yedder, dos de los mejores artilleros del campeonato actualmente, con once y quince dianas en el campeonato, respectivamente.
El Sevilla se presenta en el campo del Espanyol tras unos días convulsos que derivaron el viernes en la destitución de su entrenador, Pablo Machín, y la vuelta al banquillo de Joaquín Caparrós después de que el jueves el equipo quedara eliminado en Praga por el Slavia en los octavos de final de la Liga Europa.
Machín ya era cuestionado en las últimas semanas y más tras la derrota (2-1) en el campo del colista, el Huesca, pero la siguiente y contundente victoria ante la Real Sociedad (5-2), calmó algo los ánimos.
No obstante, la dolorosa eliminación ante el equipo checo, en el último minuto de la prórroga (4-3), aceleraron los acontecimientos y el club anunció la destitución del técnico soriano.
Después de que el equipo llegara a Sevilla a altas horas de la madrugada del viernes procedente de Praga y tras disputar sin éxito un exigente partido con prórroga incluida, la primera labor del técnico utrerano es recuperar la moral del grupo y hacer recuento de las condiciones físicas de sus jugadores.
De Praga regresaron con mermas físicas dos titulares, el centrocampista Pablo Sarabia y el nuevo central internacional Sergi Gómez, mientras que ya estaban descartados con anterioridad para el viaje el extremo Manuel Agudo 'Nolito' y el carrilero izquierdo Sergio Escudero, en proceso de recuperación de lesiones.
Caparrós, que cumplirá en el estadio del Espanyol su partido quinientos como entrenador en Primera, podría volver al sistema más clásico de cuatro defensas (4-4-2) aunque aguantará hasta el último momento para conocer los futbolistas con los que puede contar en mejores condiciones.
