1-2: Guido Rodríguez, m.36.
1-3: Guido Rodríguez, m.52.
1-4: Willian José, m.76.
Recuperar sensaciones y seguir con ellas
RCD Espanyol y Real Betis se enfrentan este viernes en el RCDE Stadium en un duelo en el que los locales buscan recuperar sensaciones tras perder ante el Elche, caer en Copa del Rey con el Mallorca y empatar sobre la bocina frente al Cádiz; y los béticos prolongar su estado de gracia tras apear al Sevilla en el torneo copero y golear al Alavés.
El Espanyol busca oxígeno en un momento complicado de la temporada y cuenta para ello con el aval de que muestra en su estadio su mejor versión: es el cuarto mejor equipo local de Primera con 20 puntos en casa, empatado con el Barcelona y el Betis, que es consciente de la importancia de la cita para consolidarse arriba.
Los pupilos del entrenador Vicente Moreno afrontan este encuentro de la jornada 22 como una oportunidad de dar un golpe en la mesa. Sumar tres puntos contra los andaluces, terceros en la clasificación, supondría acercarse de nuevo a la zona alta de la tabla.
En el último encuentro contra el Cádiz el Espanyol mostró dos caras. En la primera parte, controló el balón y gozó de las mejores ocasiones para sentenciar el encuentro, pero solo Morlanes vio portería. En la segunda, cambió el guion, se dejó remontar el partido y salvó un punto gracias a un tanto de Raúl de Tomás en el minuto 95.
El cuerpo técnico dará la convocatoria antes del partido, por lo que la disponibilidad la plantilla no está clara. En cualquier caso, los médicos están pendientes de la evolución del lateral Dídac Vilà y el centrocampista venezolano Yangel Herrera. El central uruguayo Cabrera es baja por acumulación de tarjetas.
Por otra parte, el Betis suele mostrarse como un rival duro en sus visitas al RCDE Stadium. En los últimos cinco enfrentamientos, entre todas las competiciones, en el feudo catalán, el balance es de dos empates, una victoria y dos derrotas para el conjunto andaluz.
Por su parte, el Betis de Manuel Pellegrini afronta la cita ante el Espanyol pletórico de moral aunque con los pies en el suelo como exige el chileno después de la eliminación copera al Sevilla en octavos de final y de la goleada endosada el pasado martes en el Villamarín al Alavés (4-0) en una exhibición de juego.
Llegan los verdiblancos encaramados en la tercera posición de la Liga con 37 puntos tras encadenar un empate en Vallecas ante el Rayo y la victoria frente a los babazorros, y lo hacen con la novedad principal de la vuelta de Álex Moreno al lateral izquierdo tras cumplir un partido de sanción por su expulsión frente a los vallecanos.
Pellegrini no negocia su forma de jugar aunque sí gestiona los actores llamados a ponerla en escena y, para el partido de mañana, podría volver también, respecto al once inicial ante el Alavés, el portugués William Carvalho como manijero del mediocentro bético junto al omnipresente y básico Guido Rodríguez como clave de bóveda del entramado defensivo verdiblanco.
En la zaga, podría regresar el central Marc Bartra tras las molestias físicas que lo dejaron fuera del derbi copero y del duelo liguero ante los vitorianos, y formaría pareja con Édgar González con las opciones del argentino Germán Pezzella y la de Víctor Ruiz, mientras que en el lateral diestro cuenta Pellegrini con las bazas de Héctor Bellerín y el recuperado Youssouf Sabaly.
No parece probable que el chileno introduzca cambios en el eje de magia y resolución que ponen en escena el francés Nabil Fekir y su socio Sergio Canales, por lo que las novedades arriba podrían estar en las permutaciones para completar el resto del once.
Las piezas son muchas en un esquema innegociable y los que entran en ese bombo son tan titulares y decisivos unos como otros, tales son los casos del máximo goleador bético, Juanmi Jiménez (12), y los nueves Borja Iglesias y William José da Silva, junto con jugadores como Aitor Ruibal, el recién renovado Rodrigo Sánchez 'Rodri' o Cristian Tello, entre otros.
Juegue quien juegue, máxima de Pellegrini con una plantilla enchufada en su totalidad, el Betis lo hará con su vocación de ataque, de presionar y robar en campo contrario, tener la pelota y tocar para que los de arriba hagan lo suyo, lo que ha llevado a los verdiblancos a estar arriba y vivos en tres competiciones.