La lluvia más bonita de la Navidad
El fútbol existe por y para los aficionados. Un hilo conductor idílico para superar obstáculos, olvidar el día a día y evadirse por unos momentos de la realidad. De abuelos a padres y de padres a hijos. Precisamente los niños serán protagonistas este sábado en el Benito Villamarín, donde el Real Betis protagonizará un espectacular gesto con los más pequeños.
Encabezado por la Grada Gol Sur 1907, aunque la iniciativa es del club, se ha invitado a todos los béticos a llevar peluches al estadio. El objetivo, forjar durante el descanso una lluvia de esos juguetes dirección al terreno de juego. Una iniciativa que tiene como principal premisa ayudar a los más pequeños y que ninguno se quede sin un regalo estas Navidades.
Un gesto pionero en España y que vuelve a refrendar por qué la afición del Betis es especial. No obstante sí se viene realizando en los últimos años en varios países. Uno de los más famosos, el ADO Den Haag holandés. Hace dos años, conscientes de que en la grada inferior había un grupo de niños ingresados en el Hospital de Rotterdam, enfermos de cáncer, quisieron darle una sorpresa y realizar una lluvia masiva de peluches, a los niños del equipo rival.
Un gesto que adoptó la propia hinchada del Feyenoord. Durante el día del niño, en agosto de este 2018, los aficionados locales protagonizaron una lluvia de peluches ante el Excelsior. Este próximo fin de semana también se podrá ver entre el Baxi Manresa y el Tecnyconta Zaragoza, de la Liga Endesa.
El primero, en Canadá
Pero esta lluvia tiene un precursor. No es otro que el equipo canadiense de hockey sobre hielo, Calgary Hitmen. Este posee una tradición muy particular desde 1995. Tras el primer gol que su equipo marque jugando como local en diciembre, los aficionados deben arrojar peluches a la pista helada. De hecho el pasado año se recogieron 28.815 muñecos, en la costumbre conocida como "Teddy Bear Toss.
Ahora este fin de semana toma el relevo el Real Betis. Un club siempre identificado por su solidaridad y por ayudar a los que más lo necesitan. Un ejemplo más de que en Heliópolis el fútbol va mucho más allá de lo que pase en el terreno de juego.
