La celeridad del Betis en el mercado
El Betis ha llegado a mitad del mes de enero con los deberes hechos en el mercado de invierno, al menos en el capítulo de fichajes. El conjunto verdiblanco ha incorporado a sus filas a Carles Aleñá, quien llegó en calidad de cedido del Barcelona, y a Guido Rodríguez, procedente del América, y que cubre la necesidad que arrastraba el equipo de un pivote defensivo.
El club ha acelerado esta temporada el cumplimiento de una hoja de ruta marcada desde hace tiempo y que, ahora, le hace estar atento a las últimas oportunidades que pueda ofrecer el mercado y en dar salida a algunos de los futbolistas que tienen un rol más secundario. Todo justo antes de que este domingo comience la segunda vuelta ante la Real Sociedad.
El anuncio de la cesión de Aleñá, a quien el Betis ya estuvo a punto de incorporar en verano, se produjo en los día finales de diciembre. El jugador del Barcelona ya debutó contra el Alavés en LaLiga Santander como bético y disfrutó de su primera titularidad en el partido de la Copa del Rey que el equipo de Rubi jugó en tierras vascas ante el Portugalete.
Guido Rodríguez, por su parte, se convertía de manera oficial en jugador del Betis este miércoles y ya se ha entrenado a las órdenes de Rubi. El argentino, como Aleñá, es un futbolista que el club venía siguiendo desde hace tiempo y que apareció entre los candidatos en verano. Ahora se ha cristalizado un fichaje que debe dar equilibrio al equipo.
Con algo de más de dos semanas para que se cierre el mercado de invierno el Betis debe resolver el futuro de algunas salidas. Tras las marchas de Kaptoum al Almería, la cesión de Ismael al Alavés y el cambio de destino de Camarasa también al cuadro vitoriano, quedan algunas incógnitas por despejar. Son los casos de Javi García, Francis e incluso saber si Cristián Tello se mantiene como verdiblanco. Esta última salida si podría activar alguna llegada.