El regreso del derbi del colorido y los sonidos en las gradas dos años después
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Igualdad total en los derbis disputados en el campo del Betis
Sin duda uno de los grandes alicientes del derbi de este domingo será la vuelta de los aficionados a las gradas en un encuentro de la máxima rivalidad entre el Real Betis y el Sevilla FC. La pandemia provocó que los tres últimos se celebraran sin espectadores y ahora regresa el colorido al Benito Villamarín, donde se celebrará el primer capítulo de esta temporada de estos choques tan especiales.
Aunque un derbi siempre es un derbi y levanta pasiones con o sin espectadores, el colorido que le dan los aficionados en las gradas le da una dimensión diferente a una cita de esta índole. Algo que no sucedía desde el 10 de noviembre de 2019, con el Betis-Sevilla disputado en el Benito Villamarín, el último con público. Meses después el coronavirus cambió todo, también los derbis.
Se cumplen casi dos años ahora de ese derbi con aficionados en el que el Sevilla venció por 1-2. Ocampos adelantó a los sevillistas, Loren empató para los béticos y De Jong estableció el definitivo 1-2. Rubi y Lopetegui, el vasco sigue, eran los entrenadores. En aquella ocasión la entrada fue de 53.110 espectadores en las gradas del estadio heliopolitano.
Nada que ver al colorido a los siguientes tres derbis, que se celebraron sin aficionados en las gradas. El primero de esta serie fue el 11 de junio de 2019, curiosamente en el partido que reanudaba la competición tras el parón forzoso por el covid. Aquel Sevilla-Betis se celebró en el Sánchez-Pizjuán y venció el cuadro nervionense por 2-0 con tantos de Fernando y Ocampos.
Luego llegaron los dos de la temporada pasada, ya con Manuel Pellegrini en el banquillo del Betis. El primero, único de esta serie sin público en las gradas, fue el 2 de enero de 2021 y acabó con empate (1-1). Canales y Suso marcaron. El tercero fue el 14 de marzo de este año en el Sánchez-Pizjuán y ganó el Sevilla con tanto de En-Nesyri.
Ahora vuelven los derbis con aficionados en las gradas, ya con la posibilidad de completar el cien por cien del aforo. Una situación que podría provocar una excelente entrada en el Benito Villamarín similar a la que se vivió hace dos años, todo antes de que la pandemia transformara todo e impidiera que se viera el colorido y los sonidos de los derbis.